Entrevista a Joaquín Cezón, presidente de la comisión de Industria de la Cámara de Comercio de Zaragoza
Es la segunda convocatoria de estos encuentros profesionales. ¿Qué les impulsó a organizarlos incialmente?
El origen está en la constitución del propio clúster aeronáutico, para aprovechar las posibilidades que aportan las empresas de Aragón, altamente competitivas en un sector complejo como es el de la automoción. El objetivo era buscar sectores que no estuvieran en una situación de crisis y el aeronáutico era uno de ellos. Así nació la primera edición de los encuentros de la subcontratación en el marco de la industria en general. Y la vista de nuestras posibilidades, pensamos en que la mejor fórmula sería unas jornadas que permitieran el contacto entre las empresas y aprovechando contactos con el sector aeronáutico que ya habíamos hecho por ejemplo en Aquitania, Toulousse, etc.
Así que, el origen de estas jornadas es que si el sector está creciendo, y sabemos que las empresas aeronáuticas no quieren crecer a nivel interno, sino que prefieren subcontratar (porque así nos lo dicen) tenemos una oportunidad para nuestras empresas.
Puesto que las primeras jornadas generaron mucho interés, y diría incluso que fueron exitosas si nos ceñimos al volumen de negocio generado, nos planteamos este segundo encuentro.
Entiendo que son encuentros B2B, poniendo en contacto empresas subcontratistas con las empresas tractoras
Sí. La idea es cambiar la filosofía de una feria propiamente. Nos ponemos en contacto con empresas del sector para saber qué necesitan subcontratar y a continuación les suministramos una relación de empresas que pueden cubrir sus necesidades. Así, las tractoras deciden con qué empresas quieren reunirse y, a partir de aquí, se organizan las jornadas para dos días, donde el ritmo de reuniones es muy ágil. Esta manera de organizarnos permite también que, si la empresa seleccionada, necesita de un tercero para determinados pasos, le podemos dar apoyo en su proyecto.
Uno de los problemas de las subcontratistas es la dificultad de darse a conocer. ¿Estas jornadas permite hacerlos más ‘visibles’?
Sin duda. Por eso nos sentimos orgullosos de dar a conocer nuestras empresas a otras de fuera que, de otro modo, quizá no hubieran contactado con ellas motu propio. Luego veremos qué negocio sale, pero el primer contacto se lo facilitamos en estas jornadas.
Y por su experiencia, ¿qué tipo de requisitos debe cumplir una pyme para que una ‘grande’ de la aeronáutica apueste por ella?
En cualquier caso, estamos hablando de pymes
Sí, en la zona de Aragón nuestro tejido empresarial es mayoritariamente pyme. Sí existe una empresa de mayores dimensiones, Aernnova, que las veces hace de subcontratista y de subcontratador, pero es la excepción. Aun así es importante decir que nuestras empresas son capaces de dar soluciones globales, pueden resolver una pieza en un conjunto. ¿Cómo? Pues gracias a la variedad de empresas que existen en Aragón. Es decir, quizá un proyecto necesita de varias de dos o tres actividades diferentes, de modo que nuestro reto es encontrarles las empresas que puedan satisfacer esta demanda de modo global. Y es que la demanda ya no es de una pieza en concreto, sino de un conjunto, requeriendo una combinación de electrónica, mecanizado, etc.
Y precisamente el principal trabajo del clúster es facilitar que las empresas puedan presentarse a un ‘pulse’ si es necesario. E incluso en el caso que en el clúster no haya empresas de una determinada actividad para resolver la demanda, desde la Cámara de Comercio de Zaragoza buscaremos la empresa que pueda hacerlo.
Siendo pymez, quizá uno de los principales retos es dar el salto a la internacionalización. ¿En qué medida están preparadas para ello?
Efectivamente, y es complicado. Pero precisamente desde la comisión de Industria que presido incentivamos a las empresas para que busquen sinergias comunes. Deben entender, las empresas pequeñas, que las que antes eran su competencia, quizá hoy pueden ser sus aliadas en determinados proyectos. Hoy nadie viene a comprar y hay que salir a vender, y mejor juntos. Por otro lado, también hacemos gestiones para facilitarles este proceso. A ello contribuyen proyectos de la propia Cámara, como uno que tiene en Marruecos.
¿Y de cara al mercado interior?
También hay cosas para mejorar. Nos hemos puesto en contacto con Hegan, con el de Madrid, hemos visitado Sevilla. El objetivo es estrechar lazos y establecer colaboraciones y si en el clúster de Aragón no pudiéramos desarrollar una solución concreta, no se debe dejar perder. Es mejor trasladarlo a otro clúster que sí pueda.
Para finalizar. ¿Estos encuentros tendrán algún tipo de periodicidad?
Sí. Lo cierto es que ya le hemos dado una mayor visibilidad esta segunda edición y la intención es lograr que al final tenga una dimensión nacional para que no se escape ningún negocio de España porque no tengamos nosotros la capacidad. El sector da para ello y no queremos perder la oportunidad.