El el sector invierte en I+D+i para lograr soluciones totalmente sostenibles que no pierdan ni un ápice su capacidad de protección del producto

La digitalización de los negocios y la cada vez mayor conciencia de la sociedad hacia el cuidado del medioambiente influyen claramente en el sector del embalaje: mayor uso de materiales reciclados y reciclables, monomateriales y un menor consumo energético.

La sostenibilidad es uno de los principales retos a los que se enfrenta esta industria y es innegable que algunas de las premisas para cumplir con dicho objetivo son la reducción de materiales como el plástico y una mejor optimización del reciclaje. Por eso, el sector invierte en I+D+i para lograr soluciones totalmente sostenibles que no pierdan ni un ápice su capacidad de protección del producto que contienen y que sean la alternativa que buscan los consumidores ante la necesidad de reducir el uso y consumo de este material menos respetuoso con el medioambiente.

“En Embalajes RAJA llevamos mucho tiempo implantando políticas respecto al plástico. Es innegable que tiene propiedades muy difíciles de sustituir, por eso siempre abogamos porque sea reciclado o por sustituirlo por soluciones alternativas más sostenibles como el cartón”, afirma Bernard de Paauw, director general de Embalajes RAJA España.

Según la compañía, el sector debe priorizar productos responsables certificados con etiquetas como la de Cadena de Custodia o FSC, por materia prima renovable, por reducir los residuos, etc. Para ello, existen alternativas como el maíz para fabricar bolsas biodegradables, o como el papel y la celulosa, opciones viables siempre y cuando se gestionen bien los recursos.

“Estimo que en 5 o 10 años podremos tener productos totalmente reciclados y reciclables y sin contenido de plástico. Para ello, empresas y consumidores debemos remar juntos en la misma dirección para poder llegar al objetivo 'Zero Waste’”, concluye de Paauw.