Tecnología, comunicación e inclusión: claves para mantener la moral de los empleados
Paul Lerigo, director de marketing de la División de Inspección de Productos de Mettler Toledo
01/09/2020La motivación del personal supone un reto enorme y cambiante para todos los fabricantes, y el periodo de confinamiento debido al COVID-19 (y la salida de él) le ha añadido nuevas particularidades. Una plantilla satisfecha, desde el departamento de administración hasta el personal de la planta de producción, se traduce en una mayor productividad, compromiso, lealtad y competencia.
Las limitaciones extraordinarias impuestas a los fabricantes durante la pandemia de coronavirus deben llevar a las empresas a replantearse cómo pueden satisfacer, comprometer y motivar a sus empleados en sus nuevas funciones. Entre ellos, se encuentran aquellos que se han visto afectados por una suspensión laboral (y, por ende, se sienten especialmente aislados), una reducción de las horas de trabajo, un recorte salarial o cambios en sus turnos, o que han empezado a teletrabajar.
Por supuesto, cada fabricante tiene su propio enfoque. En la División de Inspección de Productos de Mettler Toledo, hemos alcanzado el éxito centrándonos en la tecnología, la comunicación y la inclusión. Estas son algunas ideas que hemos puesto en práctica durante el periodo de confinamiento:
Conexión digital
El confinamiento por el COVID-19 puede que llegue a considerarse como un momento decisivo en el que la capacidad de la tecnología digital para facilitar el teletrabajo supuso la demostración definitiva de su crucial importancia en el sector empresarial.
Si bien no todas las empresas estaban preparadas, gracias a todo lo aprendido, seguro que lo estarán la próxima vez que suceda algo similar. Cerciórese de que su personal cuenta con la infraestructura y el equipo digital adecuados, así como la formación pertinente para su uso.
Reestructuración de prioridades y objetivos
Las expectativas operativas y comerciales de la empresa deben reevaluarse en función de la nueva realidad a la que todos nos enfrentamos; además, deben reconsiderarse las evaluaciones y los objetivos del rendimiento del personal a fin de llevar a cabo una reestructuración de cara a esta “nueva normalidad”.
Este enfoque impulsará la motivación del personal. Sus empleados no sentirán que se les imponen exigencias onerosas e innecesarias, ya sea individualmente, como equipos o como una organización completa. La clave está en proponerles un desafío asumible por el que luchar.
Comunicaciones fortalecidas
Mantener al personal informado no es más que una parte; debe hacerles sentir valiosos.
Organizar el envío de actualizaciones laborales periódicas a través de un boletín electrónico resulta sencillo, pero como empleadores tenemos el deber de cuidar aún más a nuestros empleados, ya que la realidad es que las restricciones del confinamiento afectan a cada persona de manera diferente.
Las empresas podrían plantearse la introducción de un sistema que emparejara a miembros del equipo, de manera que tuvieran la responsabilidad de estar en contacto, asegurarse de que todo va bien y ayudarse entre ellos.
Interacción social
La comunicación en la línea de producción resulta fundamental para mantener unido a un equipo durante largas horas y turnos complicados; lo mismo puede decirse de los trabajos de campo y de los departamentos administrativos. Adóptela y tome la iniciativa de reunir de nuevo al equipo durante el confinamiento, mediante reuniones virtuales y cuestionarios. Así, mantendrá la solidez del vínculo entre trabajadores y resaltará su importancia en el funcionamiento de la empresa.
Acogida de las innovaciones
Ha llegado el momento de dar rienda suelta al enorme potencial que tiene su plantilla. Aquellos afectados por la suspensión laboral siguen pudiendo adquirir nuevos conocimientos gracias a formaciones; asimismo, debe animar al personal de todas las áreas a plantear ideas innovadoras que puedan mejorar el funcionamiento de la empresa.
La innovación continua es la única medida que, como empresa y gracias a su colaboración, nos permitirá seguir siendo competitivos, mejorar la moral, maximizar el retorno de la inversión y, posiblemente, aumentar la productividad. Si bien las innovaciones por sí solas no son suficientes para vencer el COVID-19, pueden ayudar a la hora de buscar métodos de mejora en las diversas formas de trabajo y las nuevas tecnologías.
Conclusión
En general, como hemos hecho nosotros, los fabricantes deben cerciorarse de estar preparados para ser flexibles y rápidos, como cuando arranca una nueva empresa. Así, todo el personal se sentirá capacitado y valorado en la crucial función que desempeñan en la empresa para asegurar la continuidad de su éxito.