Nace un complemento alimenticio que mejora 11 biomarcadores de riesgo cardiovascular hasta en un 57%
09/05/2013
9 de mayo de 2013
Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con el Hospital Universitario Morales Meseguer de Murcia, ha evaluado el efecto preventivo de un extracto de uva en 150 pacientes con riesgo cardiovascular. Tras dos ensayos clínicos de un año de duración cada uno, este extracto, basado en una patente del CSIC, se ha incorporado a un nuevo complemento alimenticio con propiedades cardiosaludables.
Un equipo de investigadores del CSIC ha evaluado el efecto preventivo de un extracto de uva en 150 pacientes con riesgo cardiovascular.
“Stilvid Cardio es el único complemento que ha demostrado su seguridad y eficacia en estudios a largo plazo que incluían pacientes con alto riesgo cardiovascular sometidos a un tratamiento optimizado”, ha explicado en una rueda de prensa el coordinador de los trabajos, Juan Carlos Espín, investigador del CSIC en el Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura de Murcia. Asimismo, en la presentación, celebrada en la sede central del CSIC, han intervenido el presidente del organismo, Emilio Lora-Tamayo, el jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Morales Meseguer de Murcia, José Antonio Ruiz Ros, y el presidente de la Federación de Academias de Medicina Europeas y director científico de Actafarma, Jesús Fernández-Tresguerres.
El nuevo complemento, presentado en cápsulas, mejora hasta en un 57% 11 biomarcadores asociados a una mayor probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular en pacientes que ya están sometidos a un tratamiento completo, “y todo ello –precisa Espín– con una excelente tolerancia y ausencia de efectos adversos”.
En concreto, en el caso de los pacientes que aún no han sufrido un evento cardiaco pero tienen un alto riesgo, el compuesto disminuye frente al placebo los niveles de PAI-1 (17%), una sustancia que impide la degradación de los trombos; y de ApoB (7%) y LDLox (17%), dos marcadores relacionados con la formación de placas de ateroma en las arterias coronarias y que aumentan la posibilidad de desarrollar una enfermedad cardiovascular. También mejora otros marcadores relacionados con el estado de inflamación y que están implicados en el proceso de aterotrombosis que desencadena un síndrome coronario agudo. En concreto, disminuye los niveles en sangre de hsCRP o proteína C reactiva (34%), el TNFα o factor de necrosis tumoral-alfa (20%), el cociente proinflamatorio IL-6/IL-10 (50%), así como aumenta los niveles de una citoquina antiinflamatoria: la interleuquina IL-10 (30%).
En cuanto a los pacientes que ya han sufrido eventos cardíacos, como un infarto o una angina de pecho, Stilvid Cardio aumenta frente al placebo en un 23% los niveles de adiponectina, una sustancia antiinflamatoria protectora relacionada con un menor riesgo cardiovascular. Además, disminuye la cantidad de PAI-1 en un 57% y el perfil aterogénico en sangre en un 13,4%, todo ello implicado en el desarrollo y pronóstico de las enfermedades cardiovasculares. “El complemento también redujo en las células sanguíneas de estos pacientes la expresión de 27 genes críticamente implicados en aterotrombosis”, asegura Espín.
Stilvid Cardio, comercializado por laboratorios Actafarma, está compuesto por un extracto integral de uva con un alto contenido en polifenoles. Incluye sustancias con propiedades antioxidantes y cardioprotectoras, como las procianidinas, el hidroxitirosol, un fenólico presente en el aceite de oliva virgen que contribuye a disminuir el daño oxidativo de los lípidos en sangre, y la tiamina (vitamina B1), presente en carnes, verduras y legumbres. El complemento alimenticio está inspirado en la dieta mediterránea que, según la Fundación Española del Corazón (FEC), reduce un 30% el riesgo cardiovascular.
“Una cápsula aportaría el hidroxitirosol que hay desde un vaso al día del aceite más rico hasta 16 litros diarios de los aceites virgen extra de menor contenido. Esta comparación sería astronómica en aceites de oliva que no son extra virgen, donde el contenido de esta molécula es mucho menor”, precisa el investigador del CSIC.