Wenglor Sistemas de Sensores, S.L. - Sondas, sensores, palpadores y detectores dimensionales
Wenglor 2K
Sensores fotoelectrónicos: con una robusta carcasa de acero inoxidable 316L con protección IP69K que soportan una limpieza intensiva a alta presión
Especialistas en entornos industriales rigurosos y exigentes: los sensores fotoelectrónicos de tipo 2K son las últimas incorporaciones a la serie de productos PNG//smart. Gracias a su robusta carcasa de acero inoxidable 316L con protección IP69K, pueden soportar una limpieza intensiva a alta presión de hasta 100 bar a temperaturas de hasta 80 °C, agentes de limpieza agresivos, refrigerantes y lubricantes, así como influencias mecánicas y corrosión. Pueden medir distancias, detectar objetos y comunicarse de forma inteligente a través de IO-Link. El diseño en miniatura, que se puede integrar fácilmente en cualquier sistema, está disponible para los usuarios en seis principios funcionales y tres fuentes de luz.
En las industrias alimentaria y de envasado, las instalaciones de producción deben limpiarse periódicamente con agentes de limpieza agresivos y de alta presión. Los altos requisitos en las áreas de lavado también se aplican a los sensores instalados en los sistemas. La serie 2K con carcasa de acero inoxidable 316L (1.4404 / V4A) cumple estos requisitos gracias a su alta clase de protección IP69K y certificado ECOLAB. Montados en una carcasa en miniatura compacta (35,5 × 18,5 × 17 mm), los sensores fotoelectrónicos también son adecuados para aplicaciones en ingeniería mecánica y de plantas, p. ej. en fresadoras. Gracias a su diseño robusto, los sensores también son resistentes a refrigerantes y lubricantes.
En las industrias alimentaria y de envasado, las instalaciones de producción deben limpiarse periódicamente con agentes de limpieza agresivos y de alta presión. Los altos requisitos en las áreas de lavado también se aplican a los sensores instalados en los sistemas. La serie 2K con carcasa de acero inoxidable 316L (1.4404 / V4A) cumple estos requisitos gracias a su alta clase de protección IP69K y certificado ECOLAB. Montados en una carcasa en miniatura compacta (35,5 × 18,5 × 17 mm), los sensores fotoelectrónicos también son adecuados para aplicaciones en ingeniería mecánica y de plantas, p. ej. en fresadoras. Gracias a su diseño robusto, los sensores también son resistentes a refrigerantes y lubricantes.
