El sabor del soleado Tirol en cada bocado

La sociedad cooperativa Milchhof Brixen-Brimi procesa más de 89 millones de kilos de leche cada año en las montañas del Tirol. En esta región alrededor de 1.100 agricultores confían su leche cruda a los 150 empleados de la planta de Vahrn. Aquí se procesa para producir diversos tipos de queso, mantequilla y nata.

Para esta empresa láctea, que se encuentra entre los principales productores de queso crema en Italia, su máxima prioridad es la producción de mozzarella. OCS Checkweighers apoya a la sociedad cooperativa, proporcionando controladoras de peso de alta precisión equipadas con células de carga de vanguardia adecuadas a sus necesidades específicas.

El producto es rechazado por medio de un sistema ‘trampilla’.

Brimi se remonta a 1927, sin embargo no fue hasta 1969 cuando Brixen y Naz-Sciaves se fusionan y forman la nueva empresa láctea Brixen. Ocho años más tarde, la planta de Vahrn inició su funcionamiento y poco después la producción de mozzarella se convirtió en su principal actividad. A través de los años creció constantemente y en la actualidad contribuye con alrededor del 75% del volumen de negocios de Brixen.

Las pesadoras OCS instaladas en esta planta, demuestran cómo esta tecnología de pesaje extremadamente precisa soporta con éxito ciclos frecuentes de limpieza. Además, el corazón de la báscula de control consiste en una célula de carga completamente sellada (CE-ES-FS). Este es un requisito previo fundamental para la controladora de peso para cumplir con el índice de protección IP 69K.

La planta de Brimi en Vahrn.

Willi Tauber, director general de Brimi, aprecia la calidad de controladoras de peso OCS y, en particular, la habilidad de la firma para proporcionar soluciones individuales adaptadas a las necesidades del cliente. El ejemplo perfecto de esto lo encontramos en el sistema especial de rechazo que se montó en uno de los equipos instalados en Vahrn, cuyo mecanismo permite expulsar el producto no correcto mediante el accionamiento de la propia banda transportadora a modo de trampilla, que deja caer el producto en un compartimento de rechazo. Puesto que el rechazo puede venir causado por presencia de cuerpos extraños o peso incorrecto, este sistema clasifica el producto y lo dirige a la cubeta de rechazo correspondiente.

Richard Tauber, responsable de ingeniería y mantenimiento, ve en la utilización de estas básculas una ventaja competitiva interesante en cuanto a calidad y seguridad, permitiendo que su mozzarella siga gozando de gran popularidad en el sur del Tirol. Por su parte, Willi Tauber hace hincapié en lo importante que es llevar a cabo un procesamiento exhaustivo cuando se trata de leche de agricultor, aumentando el valor dentro de la elaboración de productos lácteos. “Los agricultores se sienten en buenas manos y que confían en nosotros”, asegura Tauber.

Richard Tauber, responsable de ingeniería y mantenimiento, comprueba el control de pesaje.

En Brimi valoran el espacio disponible, el diseño compacto y la robustez de los equipos de línea. “Encontramos todos estos atributos en OCS, y por si fuera poco nos aportaron la flexibilidad tecnológica que necesitábamos. Los controles son más que eficientes y los costes de mantenimiento son realmente bajos. Sin duda estos sistemas de control y detección de metales son totalmente recomendables”, aseguran Willi y Richard Tauber.

Brimi posee la certificación ISO 9002, y constantemente está evaluando y mejorando su sistema de gestión de calidad. Hoy la compañía productora de mozzarella se halla en la vanguardia del sector y está totalmente introducida en el mercado italiano e internacional.