Conaif reclama la urgente entrada en vigor del nuevo RSIF
En los últimos tiempos, como consecuencia de las mayores exigencias europeas en cuanto a reducción del impacto medio ambiental y lucha contra el cambio climático, han tomado protagonismo refrigerantes con menor potencial de calentamiento global (PCA), como el R-32, que están siendo incorporados por algunos fabricantes a los equipos que comercializan.
Este refrigerante, atendiendo a criterios de seguridad, tiene una clasificación L2 en el Reglamento de Seguridad de Instalaciones Frigoríficas (RSIF). Por este motivo, los requisitos para la instalación de los equipos que lo contengan restringen la actividad a frigoristas nivel 2. Es decir, miles de instaladores con carné RITE que habitualmente trabajan en el mercado doméstico quedan en la práctica excluidos de la posibilidad de instalar equipos con R-32.
Esta situación, que es negativa para una parte importante del colectivo de Conaif, a de los instaladores de refrigeración, sería diferente si la modificación del Reglamento en la que el Ministerio Industria, Comercio y Turismo lleva tiempo trabajando hubiera culminado su tramitación y entrado ya en vigor. Porque incorpora una nueva clasificación de refrigerantes A2L (el R-32, por ejemplo) que podrán ser manipulados por empresas frigoristas nivel 1 y también RITE.
Es una novedad que ha sido abordada dentro del grupo de trabajo constituido por el Ministerio para la elaboración del proyecto de Real Decreto que modificará el RSIF, un grupo de trabajo del que CONAIF ha formado parte junto a otras asociaciones y organizaciones de ámbito nacional, representativas del sector.
CONAIF, por medio de su Comisión de Frigoristas y con la colaboración de sus asociaciones de instaladores, especialmente de ASFRICAT, la asociación catalana de frigoristas de Cataluña, ha emitido alegaciones a este proyecto de Real Decreto teniendo en cuenta los intereses de los instaladores de frío, a los que representa de forma mayoritaria en España.
La llegada al mercado de nuevos refrigerantes, el alza continuada del precio de los gases fluorados, la reciente bajada del impuesto a éstos o la confusión generada entre los instaladores por la comercialización de refrigerantes no autorizados, son otras de las cuestiones atendidas por CONAIF que preocupan a los instaladores de frío y climatización.
La situación actual genera bastantes problemas a los instaladores RITE. También a los usuarios, a los que se exige un seguro de responsabilidad civil de 500.000 € si deciden instalar un equipo doméstico con R-32.
A juicio de CONAIF, urge que acabe el período de tramitación y el nuevo RSIF entre ya en vigor. El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo; por boca de Emilio Almazán, informó en el último Congreso de CONAIF, celebrado los días 18 y 19 de octubre en Las Palmas, de que se publicará en el BOE en el primer trimestre del año 2019.
De que su entrada en vigor se produzca cuanto antes, sin demora, depende una parte importante del negocio de miles de empresas instaladoras de toda España.