Nuevos productos elaborados con algas para mejorar la nutrición
Investigadores de la Universidad de Cádiz, en colaboración con el Centro Tecnológico de la Acuicultura – CTAQUA, reunieron en El Puerto de Santa María a más de 75 expertos dedicados a la investigación, producción, recolección, elaboración de productos y gastronomía a partir de las macroalgas. Representantes de empresas del sector, la Universidad de La Coruña o del restaurante dos estrellas Michelín Aponiente han sido algunos de los ponentes que han participado en este evento enmarcado en el proyecto EALGA, con el objetivo de optimizar la recolección y el cultivo de macroalgas en la Bahía de Cádiz.
Las algas son actualmente un recurso natural marino poco conocido y su explotación hoy día es muy baja, sobre todo la destinada a la alimentación humana. Su presentación –frescas, desecadas o en conserva–, y su uso enfocado principalmente a aplicaciones culinarias, limita su consumo a un pequeño sector de la población española. “Debido a sus importantes valores nutricionales, las algas contribuyen a una dieta saludable, por lo cual sería muy interesante su inclusión en el consumo diario de la población”, señaló Víctor Palacios, investigador del área de Tecnología de Alimentos de la UCA.
Las propiedades saludables de las algas y el potencial de la Bahía de Cádiz, como fuente de recursos marinos, motivaron la puesta en marcha de EALGA, y es que “buscamos potenciar el uso de las algas tanto para su consumo, como para el impulso del desarrollo socio-económico de la zona”, en palabras de Palacios.
Por ello, en el marco de este proyecto, los investigadores han desarrollado productos que tienen como principal característica diferenciadora las algas recolectadas en los esteros de la Bahía de Cádiz. Con el objetivo de crear productos atractivos para el consumidor y al alcance de todos, han añadido las algas como ingrediente principal a una serie de elaboraciones que fueron presentadas a los asistentes. Tomatitos cherry aderezados con vinagre de Jerez con algas, mousse de algas de tres variedades diferentes, ñoquis con pesto de algas y minihamburguesas de soja con algas, son las preparaciones que han podido degustar y valorar los asistentes a la jornada.
Los productos han sido elaborados teniendo en cuenta las características nutricionales y tecnológicas de las algas, pero a su vez resaltando su potencial sensorial, para lo cual se ha empleado tanto el alga fresca como deshidratada o en polvo. “Tal como se ha demostrado en la degustación, las algas se pueden ser un ingrediente protagonista en aderezos y condimentos, emulsiones líquidas, semilíquidas y pastas, o en alimentos tipo cárnico aprovechando la riqueza en proteínas de algunas algas que se desarrollan en los esteros, como la lechuga de mar”, explicó Víctor Palacios.
Todos los productos están patentados o en vías de patente y uno de ellos, la mousse de algas, ha sido premiado con un accésit en los premios AtrÉBT del CEI.MAR y ha recibido un tercer premio en el concurso nacional de Ecotrophelia de FIAB. Según los expertos del proyecto EALGA, la elaboración de estos productos es totalmente viable y puede tener gran aceptación en el mercado de acuerdo a los estudios realizados.
La rentabilidad del cultivo de las algas
Los investigadores de EALGA, en colaboración con CTAQUA, han llevado a cabo experiencias de cultivo de algas para poder estimar las variables ambientales que más influyen en los cultivos y las condiciones que deben tener las instalaciones. Incluso pueden conseguir determinar la época de recolección más favorable en función del perfil nutricional que se desee para el consumidor final.
Tras desarrollar varios estudios sobre la biología de las especies de macroalgas presentes en la Bahía de Cádiz, por su composición nutricional, características organolépticas y comerciales, así como su presencia estable en los esteros, seleccionaron las especies del género Ulva, Chondracanthus teedei y Gracilariopsis longissima.
Para determinar las condiciones más favorables para desarrollar el cultivo, han desarrollado estas experiencias durante los periodos de primavera-verano y otoño-invierno, con el fin de poder realizar una comparativa de crecimiento de las algas por estaciones.
Según expuso durante la jornada Ignacio Hernández Carrero, catedrático de Ecología e investigador principal del proyecto EALGA, para asegurar su rentabilidad, el cultivo de las algas debe ser una actividad complementaria a otros aprovechamientos en los esteros. “Se deben buscar aprovechamientos compatibles (ostiones y algas, o peces y algas, por ejemplo) a partir de nuevos diseños de las instalaciones centrados en la acuicultura integrada o el cultivo multitrófico. La rentabilidad requiere de una colaboración entre el sector privado y actuaciones de I + D que mejoren todos los aspectos relacionados con el cultivo”, señaló.
Los siguientes pasos del proyecto se van a centrar en terminar el estudio del cultivo de Gracilariopsis y Chonracanthus “en una zona de alto flujo y un análisis del contenido nutricional de las cosechas”. A parte de eso, añade, “buscaremos sentar las bases para un nuevo proyecto en el que abordemos el estudio de los ciclos de vida de estas especies”.
Todas estas acciones se están desarrollando en el marco del proyecto ‘Optimización de la Recolección y el Cultivo al Aire Libre de Macroalgas Destinadas a la Industria Alimentaria de la Bahía de Cádiz. Potencial Nutricional/Gastronómico e Implicaciones Ambientales’, en el que participa una decena de investigadores de los grupos ‘Estructura y Dinámica de Ecosistemas Acuáticos’ e ‘Ingeniería y Tecnología de los Alimentos’. Este proyecto se enmarca en los incentivos a proyectos de Investigación de Excelencia en equipos de investigación de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, a través de los Fondos FEDER.