Nike se plantea la venta de Hurley
El surf ya no vende. O no tanto como espera un gigante de la talla de Nike. La compañía americana está sopesando la posibilidad de deshacerse de una de sus marcas estrella, la americana Hurley, uno de los grandes referentes de la estética surfera y propiedad del grupo desde 2002.
La posible salida de Nike del mercado de la ropa surf es paradigmática de la postura de la mayoría de las principales empresas vinculadas a este universo. Las marcas han perdido su atractivo entre los consumidores que no practican surf y que ahora prefieren las marcas fashion y las prendas retro.
Nike compró Hurley a su fundador Bob Hurley en 2002 -por una suma no revelada- en un esfuerzo por expandirse más allá de la indumentaria centrada en el deporte. Hurley fundó la compañía en 1979 aprovechando el tirón de su fama en la década de 1970 por dar forma a la tabla de surf para el campeón mundial Wayne "Rabbit" Bartholomew. Tras unos primeros años fabricando tablas para Billabong, la compañía decidió poner puntio y final a su relación con la marca australiana y apostar en solitario por el textil.
En los últimos años, la demanda de ropa asociada con el estilo de vida y la cultura surfera disminuyó, hasta el punto de que el ex líder mundial Quiksilver se declaró en bancarrota en 2015 antes de ser adquirida por la firma de capital privado Oaktree Capital Management (OAK.N).
La moda ha dejado de lado la estética surfera en favor del athleisure y el poder que hace años tenían marcas como Quiksilver, Billabong o Rip UCurl, ahora esta en manos de enseñas como Supreme o las renacidas fila y Champion.