Juntas de estanqueidad metaloplásticas: enchaquetadas
Son las clásicas juntas enchaquetadas utilizadas en la construcción de motores, instalaciones de descarga, industrias químicas y construcción de aparatos e intercambiadores de calor. Se componen de una envoltura metálica y de un relleno blando.
La envoltura metálica se selecciona en función de su aptitud para soportar la corrosión del fluido y su temperatura; la misión del relleno blando es compensar las irregularidades de la superficie de contacto de la brida, proporcionando un efecto "muelle". Lo usual es el empleo del clásico perfil F8, que es la habitual junta enchaquetada compuesta de una envoltura y de una tapa metálica de cierre.
Como materiales metálicos se pueden emplear: acero al carbono, acero inoxidable, cobre, latón, níquel, monel, aluminio, etc. Para el relleno se utilizan materiales libres de amianto.
Para la colocación de la junta metaloplástica en el equipo, hay que tener en cuenta la disposición de la envoltura y la tapa en la cajera machihembrada. Según lo anterior, el lado de la envoltura deberá instalarse hacia el macho y el lado tapa hacia la cajera (hembra); caso de no realizarse así, podría dañarse irreversiblemente la junta al hundirse prematuramente la tapa.