Schaeffler continúa ampliando su solución IoT Optime
Schaeffler continúa impulsando Optime, la solución de Condition Monitoring presentada en 2020 y que tras la última actualización integra SmartCheck y ProLink, los otros dos sistemas de CM de la compañía. La integración permite cubrir un amplio espectro de máquinas e incluso plantas completas de diferentes tamaños y configuraciones.
Una solución que aumenta la rentabilidad de las plantas
El uso de sistemas de monitorización tiene una incidencia directa en la cuenta de resultados de cualquier industria. Contar con una solución como Optime permite a las empresas que utilizan procesos intensivos evitar las paradas no programadas, lo que se traduce en una mayor rentabilidad y en un aumento de la competitividad.
Gracias al uso de la para smartphones u ordenadores de sobremesa de Optime, las empresas pueden controlar de manera permanente el estado de sus plantas, independientemente de si sus líneas están compuestas por unas pocas o por cientos de máquinas. Gracias a la facilidad de instalación y de interpretación de sus datos, el personal de mantenimiento puede planificar tareas como las actuaciones necesarias o la gestión y compra de repuestos.
El Condition Monitoring, nunca antes visto
Los usuarios de servicios digitales en el entorno industrial también esperan que la información proporcionada sea fácil de entender y que el manejo del hardware y el software no sea complicado.
Los sistemas de Condition Monitoring de Schaeffler como Optime pueden utilizarse sin tener conocimientos especiales, puesto que la configuración del sistema y el análisis de los datos están automatizados. Además, la información que proporciona es fácil de entender e interpretar para los operarios de mantenimiento o los servicios externos encargados de esta tarea gracias a los datos que pueden consultarse con la aplicación de Schaeffler.
Resultados inmediatos
Una de las ventajas de Optime es su facilidad y rapidez de instalación, que puede hacerse sin tener conocimientos específicos. El sistema está formado por una red en malla compuesta por sensores inalámbricos de vibración, una conexión con tarjeta SIM, un sistema de análisis de datos IoT en entorno cloud y una aplicación para móviles desde la que se controlan los parámetros que genera.
Optime no requiere configuraciones complejas, sino que está preparado para entrar inmediatamente en servicio y proporcionar al operador la información sobre el estado de las máquinas monitorizadas clasificada según tres niveles: sospechoso (suspect), alerta (warning) y grave (severe). Además, a medida que aumenta el tiempo de servicio, Optime va conociendo cada vez mejor las propiedades específicas de cada máquina gracias a la automatización, los algoritmos para determinados tipos de daños y las funciones de aprendizaje automático.
Optime es capaz de detectar daños en los rodamientos, desequilibrios, alineaciones incorrectas, cavitación en las bombas, daños en los reductores y problemas de lubricación, permitiendo reducir los costes respecto a otras alternativas hasta en un 50%.