Juan-Vicente Miguel, Scheider Electric: “Vamos a hacerlo”

Aunque el título suene un poco atrevido, nada más lejos de lo que pedimos a nuestros proveedores.

Schneider-Electric como empresa líder en gestión global de la energía, asistió al Encuentro del Mecanizado celebrado en Valencia, para conocer la ‘corriente’ de nuestros proveedores de mecanizado, así como nuevas tecnologías, contactos, etc. Durante las ponencias, se vieron diferentes puntos de vistas sobre las empresas del mecanizado y un denominador común: mejorar la productividad y cómo no, el negocio, a través de diferentes propuestas.

Cuando empezó la ronda de intervención del público presente, se pudo apreciar que generalmente las empresas eran bastante conservadoras en cuanto al nuevo reto que nos plantea la crisis que vivimos: dar al cliente lo que quiere ahora.

En este nuevo reto, la relación entre las empresas tractoras y empresas de mecanizado ha pasado de, “queremos esto”, a “vamos a hacer esto”.

Lo que queremos decir es que durante mucho tiempo hemos estado trabajando de la siguiente forma: cuando se creaban nuevos productos, se iba con el plano y el archivo 3D a los proveedor y se pedía, “queremos esto”. El proveedor daba oferta y plazo y se empezaba a trabajar. Luego venían los retrasos por sobrecarga en los talleres y, finalmente, tras pruebas y ajustes, se tenía el producto preparado. No pasaba nada.

Con la situación coyuntural actual, lo que funcionaba ha dejado de funcionar y necesitamos dar un nuevo enfoque. Por este motivo ya no vale el “queremos esto”.

En esta situación, para poder dar al cliente lo que quiere ahora, todos debemos estar en el negocio. De ahí que ahora la relación con nuestro proveedor sea colaborativa, para poder decir, “vamos a hacer esto”.

Es aquí donde las competitividad de nuestras empresas de mecanizado, deben dar lo mejor de sí mismas para poder reducir:

1. Tiempo: es sabido por todos que los ciclo de vida de los productos cada vez son mas cortos.
2. Coste: en los tiempos que estamos... sobran las palabras.

Y cómo no, dotar al producto de un valor añadido, colaborando desde un principio con el proveedor sobre las necesidades del producto.

Además, la crisis ha acelerado el proceso de globalización de las empresas. Por este motivo la internacionalización de las empresas es crucial, ofreciendo la oportunidad de alcanzar nuevos mercados y aprovechar esta red global que estamos tejiendo para poder crecer. Es aquí donde me gustaría remarcar la importancia de los institutos tecnológicos, y de cómo pueden ayudar a la empresas del mecanizado a desarrollar nuevas tecnologías/procesos que les ayuden a ser punteras.

Y una vez se es una empresa puntera, quedaría el escalón final para llegar a la excelencia, la cooperación con universidades y centros de investigación para esculpir entre todos, el futuro del metal.