La madera 'bio', a la conquista del mercado
El sector de la madera está inmerso en un proceso de transformación o evolución basado en la innovación con el propósito de basar el negocio en la sostenibilidad. Para conseguir este fin, la industria manifiesta que es indispensable hacer un esfuerzo para crear herramientas científicas y potenciadoras de la I+D+I, claves para relanzar un sector que cuenta con un peso específico dentro de la economía española. Casi 40.000 empresas y 312.000 trabajadores, y una cifra de negocio anual que ronda los 23.000 millones de euros, son los datos que maneja el Instituto Nacional de Estadística.
Entre las novedades que están en la línea de la aplicación de la ciencia para mejorar las cualidades innatas de la madera se encuentran nuevos lanzamientos respetuosos con el medio ambiente. Uno de ellos es la llamada madera bio-sintética o ecológica de Ecomad, fabricada a partir de plásticos reciclados y fibras vegetales combinados en un proceso industrial con apariencia similar a la madera, aunque sin necesidad de ningún tipo de mantenimiento. Uno de los usos más demandados de este material es como pavimento, bordes de piscina, aislamientos o en cualquier uso en reemplazo de maderas duras y semi-duras.
La protección de la madera, para que este material pueda ser útil en cualquier espacio o circunstancia, es uno de los objetivos que la innovación está cumpliendo, además, con la garantía de cumplir con las bases de la sostenibilidad. Así, revestimientos de madera como los de Kuups In & H2O, además de utilizar madera ecológica, optimizan la resistencia y el aislamiento de la misma con un práctico sistema de termosellado a altas temperaturas. Su composición, de resinas fenólicas y fibras celulósicas, es la ideal para revestimientos y pavimentos de interiores que sufren unas condiciones extremas de humedad, como spas, baños o duchas.
Si tan importante es proteger la madera de la humedad también lo es protegerla de las bacterias que pueden habitar en ella. De esta manera, la aplicación de barnices antibacterianos es un buen aliado contra efectos indeseables. El producto Aquaver de Ilva, presentado en la última edición de Maderalia en Valencia, ha basado su estudio en el desarrollo de estructuras de tamaño nanométrico capaces de encapsular agentes antimicrobianos eficaces frente a diferentes microorganismos como las bacterias y los hongos. Ayuda a reducir en un 99% el crecimiento de bacterias e inhibir el crecimiento de microorganismos en las superficies barnizadas.
Madera inteligente
Entre los responsables de que la tecnología se aplique de la manera más eficiente en beneficio del sector de la madera destaca el trabajo del Instituto Tecnológico del mueble, madera, embalaje y afines (Aidima). Uno de sus últimos trabajos tiene como eje la aplicación de la nanotecnología a la industria con el fin de que las empresas incrementen su valor estratégico y se fomente la competitividad. Junto al Instituto para la Mediana y Pequeña Empresa Valenciana (Impiva), están inmersos en el proyecto ‘Desarrollo de nuevos materiales superhidrófobos para el sector del mueble, mediante la adición de nanocompuestos’.
Nanotecnología aplicada. Superficie hidrófoba.
Desde Aidima aseguran que el objetivo de este proyecto es aportar a ciertos materiales empleados en el sector del mueble unas propiedades diferenciadoras. Concretamente, una alta hidrofobicidad (repelente de líquidos) o incluso superhidrofobicidad y unas propiedades de autolimpieza, mediante el uso de nanocompuestos. También explican que la propiedad, conocida como superhidrofobicidad, hace que el agua derramada en la superficie de los materiales forme gotas en vez de escurrirse o adherirse. Una propiedad que da respueta a una necesidad, dada la alta absorción de agua de la madera y sus derivados, que en ocasiones se convierte en una de las principales limitaciones de su uso.
Los recubrimientos hidrófobos, núcleos del proyecto, poseen una red de elementos micro y nanoestructurados que provocan la repulsión del agua mediante la creación de bolsas de aire en la superficie que reducen así la cantidad de puntos de contacto liquido-sólido, es decir, la superficie en contacto con cualquier líquido que pueda tocarlo.
Para llevar a cabo el estudio se han aplicado diferentes productos nanotecnológicos a distintos materiales, como el haya, pino, roble, tejidos, cerámica, piel, papel y vidrio. Mediante ensayos diferentes se avalúan estos materiales de última generación en función de la durabilidad frente a temperatura, la luz, el ambiente, las rozaduras y su permeabilidad al agua. La superhidrofobicidad es una propiedad con muchas aplicaciones, recuerdan en Aidima, porque va desde impedir el manchado de las superficies y el agrietamiento de las maderas por efecto de la humedad, hasta la fatiga térmica de las superficies expuestas al ambiente. Además, esta propiedad puede preservar muebles que están en ambientes húmedos e incluso en condiciones menos higiénicas como pueden ser el baño o la cocina.
Desde el laboratorio
Otro estudio científico-nanotecnológico relacionado con la madera se ha llevado a cabo recientemente en Chile con unos resultados muy positivos. El equipo de estudiantes de la Universidad chilena logró transformar madera de haya y de pino en carburo de silicio biomórfico, un carburo de tal dureza que compite con la de un diamante. Entre las ventajas que el grupo de estudiantes enumeró tras el descubrimiento destaca que el material obtenido de la madera es de una alta conductividad térmica, dureza, resistencia a la abrasión y a la corrosión, y mantenimiento de la resistencia elástica a temperaturas de hasta 1.650º centígrados. Además, el carburo de silicio es una cerámica conductora de la electricidad y es muy estable.
Superficies hidrófobas (no se mojan).
Cada vez más las aplicaciones tecnológicas y científicas son mayores. Uno de los ejemplos más extendidos últimamente, nacido en un centro de investigación, es la madera termotratada, que ya comercializan las empresas del sector. El proceso de tratado de la madera se hace mediante choques térmicos controlados que confiere propiedades de estabilidad y resistencia a la materia prima y mejoran sus cualidades de adaptabilidad a cualquier medio. Además, y como no podía ser de otra manera, la aplicación de este tratamiento es totalmente ecológico, ya que no emplea productos químicos ni perjudiciales para el medio ambiente.