Las maderas tropicales certificadas: algo más que madera
Reconocidas como una herramienta de desarrollo económico, social y cultural, las ecoetiquetas forestales FSC (Forest Stewardship Council) y PEFC-PAFC (Programme for the Endorsement of Forest Certification schemes - Pan-African Forest Certification) permiten ver con mayor claridad el consumo de madera tropical. Elegir la madera adecuada para decorar su exterior no es fácil, pero con estas etiquetas, el consumo de esta madera puede ser más sencillo y sostenible. En este sentido, la Asociación Técnica Internacional de las Maderas Tropicales (ATIBT) pretende dar a conocer la certificación de gestión sostenible en Francia mediante la creación del programa Fair&Precious. Este colectivo apuesta por el respeto a la flora y la fauna, así como por un modelo de desarrollo económico y social que respete a las poblaciones.
Madera tropical: sostenible, estética y eficiente
El objetivo de Fair&Precious es animar a los consumidores a elegir maderas tropicales certificadas a la hora de comprar decoraciones de exterior. Esta certificación de la madera ofrece unas cualidades técnicas, estéticas y medioambientales incomparables.
Las maderas tropicales tienen una durabilidad natural única, sin necesidad de utilizar productos de tratamiento. Su dureza, su resistencia y su estabilidad en un entorno húmedo confieren a las sustancias tropicales unas cualidades técnicas excepcionales. Su color, textura, veteado y homogeneidad proporcionan a estas maderas un atractivo estético excepcional.
Elegir una madera tropical certificada significa invertir en el futuro, en un hábitat sostenible y actuar en favor del medio ambiente.
Un material óptimo para suelos y cubiertas de piscinas
El uso de madera tropical en la creación de una terraza es, sin duda, el vínculo perfecto entre el interior de la casa y la naturaleza del exterior.
De hecho, las especies tropicales son naturalmente resistentes al desgaste y a las inclemencias del tiempo. La mayoría de ellos son también resistentes a la putrefacción, insensibles a las heladas, la lluvia y los insectos, así como al cloro o al agua de mar.
Además de su extrema resistencia, estas maderas de grano fino, que no se astillan y no se calientan mucho al sol, son ideales para caminar descalzo por una terraza o junto a una piscina. En cuanto a la estética, la madera tropical ofrece una amplia gama de especies, aspectos, vetas y matices:
Fácil de mantener
La madera tropical tiene una vida útil de varias décadas, gracias a su excelente estabilidad dimensional. No necesita ningún tratamiento químico y no requiere mucho mantenimiento. Estos factores hacen que la madera tropical sea un material con una excelente relación calidad-precio. Para conservar su aspecto natural original, las maderas tropicales deben mantenerse sólo una o dos veces al año, cepillándolas y, si es necesario, aplicando un decapante para devolver instantáneamente a la madera su color original, o un saturador para prolongar el brillo.
No al comercio ilegal de madera tropical
Al comprar madera tropical, los consumidores pueden enviar una fuerte señal contra la tala ilegal y los canales de distribución no transparentes. Para ello, es necesario asegurarse de que procede de empresas responsables, certificadas por instituciones de control independientes y cuyas rutas de producción pueden rastrearse con precisión.
Este es el caso de las empresas que se han adherido a Fair&Precious. Están comprometidas a nivel local con la Gestión Forestal Sostenible, la preservación de la biodiversidad y la promoción de empleos locales en la industria de la transformación de la madera, así como con proyectos sociales. El objetivo es promover el uso de un material eco-responsable y eficiente. Cualquiera que apoye a estas empresas contribuye a la preservación de la selva tropical y al bienestar de sus habitantes