Luz al final del túnel
El año 2014 nos ha dejado una buena noticia. Por primera vez desde el año 2007, el número de empresas ha crecido en la Comunidad Autónoma Vasca, según los datos que se recogen del informe emitido por Confebask 'Evolución del tejido empresarial en la Comunidad Autónoma Vasca'. Asimismo, podemos observar que el número de autónomos ha ascendido en el año 2014, casi un 0,6%, la mejor cifra desde diciembre de 2008.
Por territorios históricos, Gipuzkoa es el territorio que más Empresas ha creado, cerca del 1,4%, mientras que en Bizkaia se ha crecido en torno al 0,7% y en Araba en torno al 1,2%. Si analizamos los datos emitidos por Confebask y los comparamos con los datos desde que empezó la crisis económica, podemos afirmar que se está creando empleo, a un ritmo moderado. Es por ello que ha llegado el momento de que todas las empresas que forman el tejido empresarial vasco se vean favorecidas con más acciones que permitan acceder a más vías de financiación.
Necesitamos que las empresas vascas puedan competir por igual con el resto de empresas del Estado y con empresas europeas. Para lograr este objetivo, además de la financiación en forma de subvenciones, hay que conocer las ventajas fiscales existentes, de las que la mayoría de las empresas desconocen su utilidad. Herramientas como el Patent Box, que permiten deducirse hasta un 60% en la base imponible del IS mediante la cesión de un conocimiento, deducciones por Medio Ambiente, deducciones por personal de I+D… Tenemos herramientas para poder conseguir el retorno de la inversión, un retorno que puede llegar a permitir a las empresas mejorar su competitividad y rentabilidad, lo que puede traducirse, por ejemplo, en creación de nuevo empleo.
El informe de Confebask revela la situación a día de hoy del tejido empresarial vasco, la mejor situación desde 2006. Es por ello que queda en manos de todos nosotros, poder avanzar hacia el final del túnel, empleando instrumentos económicos que permitan el crecimiento y apoyo de la economía en busca de la competitividad.
Esta buena noticia animará a las empresas de la Comunidad Autónoma Vasca, a priorizar su estrategia fiscal sobre impuestos, alineando sus objetivos de negocio no sólo con el cumplimiento fiscal, sino dedicando también más tiempo a actividades de valor añadido como la optimización de sus inversiones en I+D+i y los costes empresariales en general.
Poco a poco queda atrás la incertidumbre arrastrada hasta nuestros días de la coyuntura económica, despejándose las trabas al desarrollo empresarial. Así, hemos llegado a que España cuente en la actualidad con un nivel de tributación por debajo de países como Alemania, Francia e Italia, que hemos de aprovechar. Ha llegado pues la hora de buscar una mayor eficiencia fiscal, tanto a nivel regional, nacional como internacional. Al fin y al cabo el objetivo final de cualquier empresa es ofrecer al mercado el mejor producto y/o servicio a buen precio, sin incurrir en un alto coste fiscal que le impida competir. Aprovechar los beneficios y estímulos que ofrece la reforma fiscal que acaba de entrar en vigor, nos permitirá contar con empresas más competitivas. Sin duda alguna, una oportunidad que las empresas de la Comunidad Autónoma Vasca no dejarán escapar.
