Las garras modelo ‘L’ de Gamor cumplen 30 años

En julio de 1983, Gamor, S.L. lanzó al mercado un revolucionario y novedoso diseño de garras duras para el amarre en torno de piezas en bruto: el modelo ‘L’. Hoy, 30 años después, sigue siendo uno de los sistemas de amarre más demandados por la industria tornera. Básicamente, las garras Gamor modelo ‘L’ son juegos de 3-4 garras duras similares a las que equipa de serie un plato hidráulico o neumático, aunque introduce 4 novedades constructivas sobre las garras de serie: Las áreas de contacto con la pieza (zonas de amarre) son un 80% más grandes que en las garras duras de serie, dando una mayor seguridad y rigidez en el amarre; Las áreas de contacto con la pieza (zonas de amarre) son un 80% más grandes que en las garras duras de serie, dando una mayor seguridad y rigidez en el amarre; Incorporan topes de regulación y chavetas a la estructura de la garra que regulan y fijan la longitud de amarre de la pieza —en 5, 10, 15, 20, 25 mm, etc.—, tanto en amarre exterior como interior, minimizando el tiempo de colocación de pieza y apurando la superficie a mecanizar; Incluyen una separación entre los picos perfectamente estudiada y calculada para obtener el mejor amarre en todos los diámetros, sobre todo en los pequeños, disminuyendo el efecto bote.

Estas cuatro novedades, junto a la elección del mejor acero, los mejores tratamientos de temple y las mejores tecnologías de amarre Gamor, convierten estas garras modelo ‘L’ en imprescindibles para casi el 97-98% de los torneros que las prueban.

En octubre de 1983, Gamor también lanzó al mercado las garras duras modelo ‘N’ como complemento a las garras modelo ‘L’. Con las garras ‘N’ Gamor quiso cubrir los diámetros de amarre que en el modelo ‘L’ quedaban en el segundo escalón, y en ocasiones, según el mecanizado, el tornero necesitaba una manera más accesible para las herramientas. Pero, más adelante, la mayoría de torneros adoptaron el ‘N’ como un modelo de garras con topes de regulación que solucionaban los diámetros de amarre exteriores.

En Gamor llevan más de 40 años aportando soluciones al mundo del amarre del torno. Son soluciones dirigidas tanto a las grandes corporaciones industriales como al tornero autónomo. La empresa guipuzcoana sigue unas directrices básicas en cada diseño o proyecto que le solicitan sus clientes: la seguridad manda, la sencillez es la base de diseño y la rentabilidad es la meta.