La madera mejora tu estilo y marca tendencia
El diseño apuesta por la madera
Donde el uso de la madera cobra especial protagonismo es en la creación artística (escultura, arquitectura, artes decorativas, etc.). El diseño a través de la madera toma forma y genera en sí misma un concepto de serena elegancia y sobria calidez, difícil de encontrar en otros materiales.
La decoración con madera ha evolucionado hasta conceptos tan innovadores y vanguardistas que muchos de los elementos decorativos realizados actualmente proporcionan, cuando los contemplamos, una sensación placentera llena de frescura que se transmite con fuerza contribuyendo a desmitificar esa concepción unidireccional que relacionaba únicamente a la madera con lo rústico o lo antiguo.
La ductilidad y versatilidad que proporciona esta materia prima demuestra una total adaptación al medio y una perfecta interacción con todo tipo de ambientes: sobrios, atrevidos, relajantes, modernos… Es precisamente esa plasticidad y facilidad de transformación lo que posibilita la creación de multitud de ambientes.
Además, la versatilidad que caracteriza a la madera hace que nazcan excelentes maridajes con otros materiales, añadiendo valor al conjunto decorativo final, al igual que un buen vino ensalza la mejor comida. No ha de extrañar, entonces, que la madera constituya uno de los elementos indispensables para las corrientes creativas de vanguardia relacionadas con el hábitat.
La madera: el mejor escaparate
Una de las cualidades fundamentales de la madera es la enorme capacidad que tiene de conservar el calor y, por supuesto, de transmitirlo no sólo en sentido físico, sino desde una concepción visual, más emocional. Así, utilizar la madera como elemento constructivo y decorativo es crear un ambiente lleno de sensaciones, capaz de sugerir una atmósfera especial, distinguida y diferente, de evocar todo un universo de emociones. Y los expertos en marketing y técnicas de merchandising lo saben muy bien, por lo que es muy frecuente encontrar productos de madera en locales comerciales de todo tipo y en los principales puntos de venta al público de prestigiosas marcas reconocidas internacionalmente.
Sin ir más lejos, las grandes firmas de moda ubicadas en la céntrica calle Serrano de Madrid, conocida como la Milla de Oro, utilizan la madera como protagonista en sus escaparates para ensalzar sus creaciones: Carolina Herrera, Pedro del Hierro, Adolfo Domínguez, Loewe, Lotusse, Uterqüe, Boggi, Camper ….
Zara es otra de las firmas de éxito internacional que utiliza madera y productos derivados, fabricados en España, para equipar sus puntos de venta en todo el mundo y envolver con ella sus colecciones de moda, hogar, etc.
El uso de productos de madera en establecimientos comerciales va en aumento, porque está demostrado que puesto al servicio de la decoración este material logra transmitir calidez y confort, y crear ambientes que acercan al encuentro y al relax, invitando al público a entrar y disfrutar de la experiencia de comprar en un entorno que evoca lo auténtico, lo original, lo primigenio.
Uno de los ejemplos de esta tendencia son los establecimientos de Le Pain Quotidien, panadería y restaurante de origen belga, con establecimientos en todo el mundo, que utiliza sólo ingredientes ecológicos. Su filosofía se basa en “encontrar lo mejor, que desde nuestro punto de vista, sea lo mejor para todos”, y la aplican no sólo a la comida que ofrecen, sino también al diseño de sus tiendas y los materiales utilizados en ellas. En esta cadena de panadería-restaurante los muebles son de madera y una de sus piezas características es una gran mesa de madera donde se mezclan diferentes clientes para disfrutar de los productos y de un ambiente realmente acogedor.
Otros conocidos establecimientos de restauración, como las cadenas Foster Hollywood o Ribs, han convertido la madera en protagonista a la hora de crear ambientes cálidos y familiares en sus restaurantes.
Además, el atractivo de la madera para el envasado de todo tipo de productos de calidad pone de manifiesto el importante papel que juega este noble material para envolver todo aquello que merezca una especial presentación y conservación. Es el caso, por ejemplo, de los mejores vinos —desde la estuchería a las célebres barricas de roble que en su crianza oxigenan y aportan al vino textura y aroma—; o de los productos agrícolas de mayor calidad: frutas, hortalizas, setas, etc. Porque además de su resistencia, la madera es un material higiénico, con propiedades antibacterianas que aseguran la protección e higiene en la distribución agroalimentaria, conservando mejor los productos frescos.