Los materiales que garantizan la durabilidad y resistencia de las puertas automáticas Manusa

Manusa, empresa de referencia en diseño, fabricación, instalación y mantenimiento de puertas automáticas, emplea diferentes materiales a la hora de fabricar sus productos, como el aluminio o el acero inoxidable. Cada uno de estos materiales ha sido seleccionado por sus propiedades únicas, que contribuyen a la eficiencia, seguridad y la alta durabilidad de las puertas automáticas.

Uno de los materiales predominantes en las puertas automáticas de Manusa es el aluminio. Este metal, conocido por su ligereza y resistencia, es utilizado principalmente en las perfilerías y cobertores de sus puertas. El aluminio no solo es resistente a las inclemencias del tiempo, sino que también mantiene su forma bajo condiciones extremas de temperatura, sin dilatarse, contraerse o deformarse.

En muchas de las puertas automáticas instaladas para clientes de todo tipo de sectores como el sanitario, horeca, retail, aeropuertos, oficinas o residencial, el aluminio cuenta con un proceso de anodizado, un tratamiento químico que preserva la textura del material, aumentando su resistencia a la corrosión. Por otro lado, otro de los procesos que se puede aplicar en la fabricación de las puertas Manusa es el lacado, que ofrece una personalización aún mayor, con una amplia gama de colores según la gama RAL, permitiendo a los clientes adaptar las puertas automáticas a sus necesidades estéticas y de diseño.

Además de la estructura de las puertas automáticas, otro material relevante en una amplia mayoría de los diseños es el vidrio. Las hojas de muchos de los productos de Manusa son de este material. Se trata de vidrios de alta resistencia que soportan golpes y condiciones climáticas adversas, garantizando la seguridad y la robustez necesarias para un uso intensivo en lugares de alto tránsito, como hospitales, aeropuertos y centros comerciales.

Junto a ello, las puertas automáticas constan de elementos metálicos utilizados en las motorizaciones. Estas motorizaciones también pueden ser tratadas con acabados anodizados o lacados. El anodizado crea una capa superficial protectora mediante un proceso electrolítico, mientras que el lacado añade una capa de pintura plástica polimerizada al horno.

Manusa también ofrece soluciones especializadas para aplicaciones que requieren características específicas, como las puertas correderas herméticas, que suelen instalarse en centros sanitarios. Estas puertas, diseñadas para proporcionar una alta estanqueidad, se fabrican en materiales como acero inoxidable y laminados de alta densidad. Además, están disponibles en una amplia gama de colores HPL, ofreciendo opciones de personalización únicas. También se pueden combinar con vidrio, lo que permite a los arquitectos y diseñadores integrar soluciones de acceso que se adapten perfectamente al entorno en el que se van a instalar.

Que una puerta automática sea duradera depende en gran medida de los materiales con los que se fabrique. Por eso, no es casual que las puertas automáticas peatonales Manusa con operadores Visio+ 100 y Visio+ 125 hayan conseguido la certificación de durabilidad después de completar de forma exitosa cinco millones de ciclos de apertura y cierre en el ensayo certificado por Applus+.

Sin embargo, para alargar al máximo la vida útil de las puertas automáticas es importante realizar a cada producto un mantenimiento preventivo y rutinario por parte de profesionales especializados, con el objetivo de conseguir una larga durabilidad y un perfecto funcionamiento de los productos.