Pavimentos continuos industriales
5 de abril de 2011
En entornos industriales los pavimentos deben soportar, directamente, todo el movimiento interno de la actividad que se desarrolla, como tráfico intenso, vertidos químicos, derrames de ácidos, grasas, aceites, golpes y desgastes abrasivos intensos, lavados periódicos con alta presión y alta temperatura.
A todo esto, también se les pide que tengan acabados estéticos, gran resistencia al desgaste, antideslizantes, resistencia química, conductivos para eliminar la formación de electricidad estática, higiénicos, antibacterias, de fácil mantenimiento y sobre todo que sean de larga durabilidad.
Dentro de su gama de pavimentos continuos a base de resinas y siguiendo con la filosofía de la empresa de instalar suelos sin juntas, Lotum presenta unos sistemas adaptados a las exigencias que deben soportar los suelos de todo tipo de empresas, que además cumplen los requisitos solicitados por el Código Técnico de la Edificación.
Estos sistemas a base de resinas, se pueden instalar sobre cualquier tipo de sustrato previa preparación y se agrupan en 3 grandes grupos:
- Tratamientos superficiales o sellados. (hasta 0,3 milímetros espesor)
- Recubrimientos autonivelantes o multicapas. (de 0,5 a 4 mm espesor)
- Revestimientos morteros de alta resistencia. (de 4 a 12 mm espesor)
Hay que tener en cuenta diferentes factores, para la buena elección del tipo de tratamiento que necesita cada pavimento: requerimientos sanitarios, de seguridad laboral, funcionalidad, durabilidad y estéticos.
Los diferentes pavimentos que Lotum propone están basados en resinas epoxi, poliuretano, metacrilato, vinil éster, acrílicas, que, dependiendo de los requisitos específicos de cada situación, se utilizarán un tipo u otro.
Los pavimentos continuos de resina, junto con los habituales para la protección de edificios e instalaciones, como impermeabilizantes, protecciones industriales y morteros para la regeneración del hormigón, los aplican personal cualificado de la empresa.