En el almacén los movimientos y procesos se automatizan a una velocidad creciente, permitiendo a los operarios dedicar su tiempo a otras funciones de mayor valor

En el almacén los movimientos y procesos se automatizan a una velocidad creciente, permitiendo a los operarios dedicar su tiempo a otras funciones de mayor valor. Los vehículos autónomos (AGV) suponen un eslabón importante en esta transición, por ejemplo en industrias donde es crucial el manejo de piezas pequeñas o de muchas referencias distintas, como la electrónica, la ingeniería industrial, la industria farmacéutica, la automotriz, o el comercio electrónico.

En 2017, BITO presentó el LEO Locative, un vehículo de transporte autónomo para mover contenedores y cajas en instalaciones de producción, almacenes y centros de distribución. Pero ahora BITO ha ido un paso más allá con la nueva familia LEO AGV, un AGV con capacidad de carga de hasta 35 kg y una autonomía de hasta 40 km diarios, que adquiere gran flexibilidad al poderse personalizar para adaptarse a los productos y procesos de cada almacén o área logística.

Gracias a los accesorios que se pueden añadir en la parte superior, LEO Custom se adapta a los requisitos especiales de los productos, ampliando así el campo de aplicaciones posibles y haciéndolo ideal para automatizar la manipulación de materiales de volumetrías complejas tanto en entornos de fabricación como en cadenas de suministro.

Por ejemplo, en la industria de la automoción, donde es necesario trasladar a los puestos de trabajo piezas y componentes individuales voluminosos, como asientos de automóviles o alerones, LEO Custom ha demostrado su eficiencia y versatilidad, incluyendo la posibilidad de llevar carros cargados de suministros a las estaciones de montaje y devolver los carros vacíos al punto de reabastecimiento.

Esto mismo es válido para otros ámbitos, como el comercio electrónico, donde LEO AGV puede gestionar las tareas de transporte recurrentes en los almacenes de picking: por ejemplo, puede transportar los carros de picking a la zona de pedidos mientras el personal puede ser asignado a otro tipo de tareas. Según su aplicación, LEO AGV adquiere una denominación específica:

• LEO Custom: LEO puede equiparse con estructuras personalizadas para su uso en entornos de fabricación. Rutas flexibles en lugar de transportadores de ubicación fija. Puede funcionar como almacén regulador intermedio
• LEO E-commerce: LEO ayuda a la preparación de pedidos en el comercio electrónico, interconectando diferentes áreas.
• LEO Flow: LEO incluye en su estructura una mesa de rodillos motorizados para interconectar conveyors existentes con el sistema LEO de manera fácil. Es una alternativa ideal a las cintas transportadores largas con bajas cadencias.
• LEO Carrier: Utilizado como remolcador AGV, LEO arrastra carros de picking o contenedores con ruedas de gran volumen.
• LEO Fashion: LEO ayuda a los minoristas de comercio electrónico de moda a gestionar las devoluciones y hacer agrupación de pedidos sin doblar las prendas.

Otra ventaja de LEO AGV es su uso como almacén regulador intermedio: en su camino desde un determinado paso de producción al siguiente, facilita que las áreas de fabricación no se vean desordenadas o incluso bloqueadas por las mercancías, en ocasiones los materiales deben tener un tiempo de secado o simplemente deben esperar a que quede libre la siguiente estación del proceso de fabricación, para ello podemos usar el sistema LEO como secuenciador o almacén temporal en movimiento.

Por otra parte, a menudo la instalación de una cinta de transporte fija implica la ocupación del espacio disponible en el suelo y la división de las áreas de trabajo. En este sentido, LEO AGV representa una alternativa a los transportadores convencionales, pues hace el mismo trabajo sin bloquear el espacio y mantiene la misma fiabilidad en el transporte de suministros.

LEO AGV se ha desarrollado para ser gestionado mediante un control descentralizado, con el objetivo de mantener bajos los costes y el esfuerzo. Gracias a poder trabajar con una infraestructura mínima es posible un alto grado de autonomía del cliente.

Los sistemas de control central tienen la desventaja de que siempre deben utilizarse, y a menudo requieren de una infraestructura WLAN. Llegado el caso, para proyectos grandes y complejos con docenas de vehículos, el control de LEO también se puede centralizar. Por ello BITO ha confiado en sistemas de conexión estándar que permiten soluciones individualizadas para cada cliente. Por ejemplo, si la aplicación lo requiere, LEO AGV puede ampliarse con sistemas de gestión de almacenes (WMS). El sistema de navegación LEO es capaz de memorizar más de 500 destinos. Para aumentar el rendimiento de la memoria de LEO, el sistema estándar puede ampliarse añadiendo tecnología de asistencia, como una SmartBox. Una vez conectada con la estación de recogida, la SmartBox comunicará toda la información de la ruta directamente a los vehículos LEO a través de Bluetooth y después será el propio LEO que irá tomando las decisiones en función de los marcadores QR instalados en suelo. Esta opción se adapta perfectamente a las aplicaciones con un nivel muy alto de automatización. Los detalles del trabajo se introducen mediante una tablet o utilizando un escáner de código de barras ubicado en la estación de transferencia.

Los vehículos LEO AGV permiten salvar el lapso de tiempo entre dos etapas de producción y realizar la entrega Just in Time (JIT) a la siguiente estación de trabajo. Con la ayuda de LEO AGV, el concepto JIT se eleva al siguiente nivel, el Just-In-Sequence (JIS). De acuerdo con este modelo de suministro, las piezas y componentes necesarios para la producción se proporcionan en la cantidad requerida, en el momento adecuado, en el lugar adecuado y en el orden correcto (secuencia). Esto permite llegar al punto en que la persona que ensambla los componentes no tenga que elegir la pieza correcta de un conjunto de piezas, sino que se limita a elegir la siguiente pieza en la cola de suministro para el montaje.

Por otra parte, para que el JIS sea exitoso, es necesario definir muy bien todos los pasos y procesos de movimiento de piezas y mercancías. Las estaciones de transferencia permiten que los vehículos LEO puedan recoger o entregar contenedores en las mismas sin perder tiempo en esta operativa. Pueden ser simples o dobles, y se suministran ya montadas, de forma que solo es necesario colocarlas en el lugar correcto para respaldar las operaciones logísticas. Una estación se puede convertir en una estación doble para reducir el número de viajes vacíos y aumentar la eficiencia del vehículo en los bucles. Por su parte, las estaciones dobles permiten tanto la función de recogida como entrega de contenedores.

LEO AGV puede integrarse en cualquier proceso operativo en muy poco tiempo. Es tan fácil de utilizar porque tanto el vehículo como la estación se suministran montados. Su instalación, tipo Plug & Play, es rápida e intuitiva, y no precisa de una conexión WLAN ni de ninguna otra infraestructura informática.

Este vehículo autónomo, basado en la fiable tecnología de guiado óptico AGV, utiliza sus sensores para seguir la trayectoria de la cinta marcada en el suelo. Las cintas de guiado se colocan en el suelo de modo que marquen los circuitos a seguir, así como se colocan identificadores de los puntos de decisión en diversas posiciones definidas, para decidir si giramos a derecha o izquierda dependiendo del destino final.

Esto ofrece total flexibilidad para reconfigurar rutas, simplemente cambiando el recorrido de la cinta y transmitiendo nuevas rutas. Y en el caso de una nueva configuración que precise de más vehículos y estaciones de trabajo o de parada, puede añadir más vehículos y estaciones de recogida o devolución en función de los requisitos del almacén y sus procesos logísticos.

El manejo de LEO AGV es muy sencillo gracias a que todos los comandos para dirigirlo los proporcionan marcadores codificados (códigos QR) que incorporan toda la información necesaria: destinos, estaciones de recogida y devolución, duración de las paradas, qué hacer cuando la batería está vacía, etc. LEO AGV escanea los códigos y sigue las instrucciones codificadas. Es capaz de reconocer los colores del carril que indican el recorrido correcto. Vincula las estaciones de trabajo transportando bienes y materiales de A a B, recolectando o distribuyendo cargas o asumiendo transportes especiales.

LEO AGV incorpora sistemas que le permiten operar de forma autónoma e inteligente, sin fallos y de forma eficiente:

• Para asegurar los desplazamientos correctos, las señales se envían desde la Smartbox a la flota LEO AGV para indicar por ejemplo si una estación está libre para entrar;
• Para mejorar la seguridad en sus recorridos, LEO AGV va equipado con un sensor que detecta obstáculos, incluso en las curvas y otro para saber si lleva una carga o no.

El equipo funciona con baterías de litio y se puede cargar de tres maneras, mediante una estación de carga automática, mediante reemplazo de baterías precargadas o bien usando un conector para su carga de manera manual directa. Puede ser llamado al puesto de trabajo con solo pulsar un botón. Recibe las órdenes de forma descentralizada por radio y los pedidos se pueden realizan a través de una tablet o bien con lectores de códigos de barras. Asimismo, permite la integración opcional de controladores lógicos programables (PLC): Comunicación con sistemas de gestión de almacenes (WMS) y otros sistemas de gestión de flotas o comunicación mediante RS232 o RS485.

LEO AGV combina rendimiento y ergonomía con una muy buena relación calidad-precio y habitualmente tiene un retorno de la inversión de menos de un año.