Los secadores al vacío mantienen las máquinas de moldeo en funcionamiento en la nueva celda médica de Mack Molding

"Como proveedor del mercado médico, es importante maximizar el tiempo productivo de la máquina para los productos que requieren frecuentes cambios de resina y herramientas", dijo Revane. "Algunos de los productos de nuestros clientes se deben producir en lotes pequeños de 100 piezas o menos, y en una multitud de colores. Con un secador LPD en cada prensa, la resina para el siguiente trabajo está seca y lista para usarse en el momento en que la nueva herramienta está instalada."

La clave de la versatilidad del secador LPD es que tiene un ciclo de secado mucho más corto y un menor tamaño de lote que los secadores de agente secante convencionales, según Mark Hamilton de Hamilton Plastics Equipment, LLC y representante de ventas para Maguire. "El sistema LPD seca resina en tan sólo un sexto del tiempo necesario con los secadores convencionales: literalmente 40 minutos o menos, en lugar de las cuatro horas necesarias con un sistema de agente secante", dijo Hamilton. "Y debido a que el secador LPD tiene un mecanismo de avance de tres estaciones que suministra resina a la máquina procesadora mientras otro lote se está secando, es posible trabajar con lotes pequeños y aún así mantener un proceso continuo."

Cuando Hamilton habló por primera vez con Mack Molding sobre los secadores Maguire, Tom Revane era escéptico. "Mark nos convenció de usar un secador como prueba. Nuestra primera prueba fue con una resina de policarbonato con un contenido de humedad inicial de 0.24 por ciento. Después de 25 minutos en el secador, la humedad se redujo a 0.03 por ciento. Cuando muchas más pruebas demostraron que el secador LPD funcionaba de manera rápida y uniforme, pedimos una máquina para cada una de las prensas de nuestra celda médica."

Mack Molding es una empresa pionera en el procesamiento de plásticos fundada en 1920 y actualmente es un moldeador a pedido, fabricador de metales, y fabricante contratista de servicio completo con ventas anuales superiores a USD $270 millones. La compañía tiene plantas en siete ubicaciones en EE UU., opera máquinas de moldeo por inyección de 28 a 4.000 toneladas y cuenta con 1.800 empleados. Mack ofrece servicios de diseño, ingeniería, fabricación de prototipos y manufactura completa. En 2007, Mack Molding fue nombrado el Procesador de Plásticos del Año por la publicación especializada Plastics News.

En noviembre de 2007, Mack puso en marcha la nueva celda de moldeo médico en Arlington, Vermont, como último paso para concretar una decisión estratégica tomada en 2000 para ampliar la participación de la empresa en el mercado médico, de acuerdo con Carl Bickford, gerente de la planta central. La celda completamente cerrada usa una presión diferencial positiva y filtros de partículas finas para brindar una barrera protectora para el moldeo de los productos médicos. Tiene su propio personal de operación y recursos técnicos y funciona 24 horas al día.

Las resinas procesadas en forma regular en la celda de moldeo médico son policarbonato, poliarilamida, polifenilensulfona, ABS; nylon con carga de vidrio, polipropileno y elastómeros termoplásticos; se procesan formulaciones tanto ópticamente transparentes como opacas. Debido a que algunos de estos materiales son especialmente difíciles de secar correctamente, la velocidad y eficiencia de secado del sistema LPD y el pequeño tamaño de sus lotes de secado son especialmente ventajosos, de acuerdo con Revane. "No hay que preocuparse por el tiempo de secado acumulativo y la degradación del polímero", declaró.

Además de la velocidad de secado y un pequeño tamaño de lote, otro beneficio que mencionó Maguire para el secador LPD es una reducción sustancial en el consumo de energía, hasta de un 80 por ciento respecto a los secadores de agente secante antiguos que se usan actualmente. Aunque los secadores de agente secante hacen pasar aire caliente y seco sobre los gránulos o pellets para extraer lentamente la humedad y luego usan un agente secante para adsorber la humedad, el secador LPD usa un vacío para reducir el punto de ebullición del agua, convertir rápidamente la humedad en vapor de agua y literalmente jalar el vapor de agua del interior de los pellets. La necesidad del desecante se elimina y con ella el coste de regenerarlo, que se suma al coste de energía de los secadores convencionales.