Durante la feria de Limpieza, Hygienalia 2021
La EFCI presenta un estudio que analiza el impacto de la COVID-19 en el sector de la limpieza industrial en Europa
El informe proporciona un análisis cualitativo de la pandemia de la COVID-19 en la industria de la Limpieza en Europa, así como de los efectos en las empresas y empleados en algunos países.
La Federación Europea de la Industria de Limpieza y Facility Services (EFCI), de la que forma parte la Asociación Profesional de Empresas de Limpieza (Aspel), ha presentado un estudio que analiza el impacto de la COVID-19 en el sector de la Limpieza Industrial en Europa, basado en las respuestas obtenidas de los miembros de EFCI sobre los efectos de la pandemia.
Así lo ha hecho la directora general de la EFCI, Isabel Iglesias, durante la feria Hygienalia, que se ha celebrado en el pabellón de cristal de la Casa de Campo, en Madrid. Durante la misma, también ha tenido lugar una conferencia sobre las prioridades del sector de la limpieza para su recuperación y análisis del impacto COVID-19, en la que ha participado el presidente de Aspel y EFCI, Juan Díez de los Ríos; y el presidente de Afelin, Jesús Martín, que ha sido moderada por el director de la revista E&L, Jorge Martín.
De esta manera, la directora general de la EFCI, Isabel Iglesias, ha puesto sobre la mesa los principales datos del informe, que muestran cómo la facturación general en el sector europeo de la limpieza disminuyó debido a la irrupción del virus como consecuencia de la disminución en el número de contratos cancelados o suspendidos temporalmente. En este sentido, Iglesias ha declarado que, para contrarrestar las consecuencias negativas de la disminución de la facturación, “la mayoría de las empresas de limpieza ampliaron su cartera de servicios mediante la introducción de nuevas tecnologías y/o servicios”.
En relación a los contratos, el estudio de la EFCI desvela que en la mayoría de países el número de contratos con el sector público no se vio afectado de manera importante o incluso experimentó un aumento debido a una mayor demanda en ciertos servicios de limpieza. Por el contrario, según ha manifestado su directora, “el número de contratos con el sector privado disminuyó radicalmente en casi todos los países europeos, principalmente por el cierre o la inactividad total o parcial de las instalaciones e instituciones privadas”.
Por otro lado, ha explicado que, entre las medidas de personal implementadas por las empresas de toda Europa, destacan los despidos temporales y congelaciones de la contratación, seguidas de despidos permanentes y vacaciones obligatorias.
Respecto a los cambios en los períodos de trabajo de los servicios de limpieza, Iglesias ha explicado que debido al cierre o la limitación de horas de trabajo debido a los toques de queda y los cierres, “las horas de trabajo del personal de limpieza cambiaron”. Por ejemplo, ha manifestado “en las oficinas, la demanda de servicios de limpieza durante las horas de trabajo aumentó siguiendo los criterios de prevención de la contaminación para garantizar la seguridad y el bienestar de los empleados”.
Datos del sector en Europa
La directora general de la EFCI también ha recalcado los principales datos del sector de la limpieza en Europa antes de la irrupción de la COVID-19, que reflejan cifras del 2018 -debido a que los datos agregados del sector a nivel europeo se publican cada dos años-. En este sentido, ha declarado que "la industria europea de la limpieza creció un 16,5%, alcanzando una facturación de casi 130 mil millones de euros en 2018".
Además, ha asegurado que durante ese mismo año la industria europea de limpieza creció en términos de empresas, alcanzando un total de 296.927 en 2018 debido, en gran parte, al crecimiento del número de empresas en Alemania, Italia, España y Francia. Por otro lado, ha recordado que los cinco países europeos más grandes en términos de facturación en el sector (con un total del 70%) como son Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y España, también tienen el mayor número de empresas (60% del total).
Por último, ha incidido en el aumento de casi un 6% del número de empleados, con un total de más de cuatro millones de personas empleadas en el sector, siendo las tasas de crecimiento de más del 40% en Dinamarca, Letonia y Chipre.