Atlas Copco, S.A.E. - Div. Compresores - Bombas de vacío
Atlas Copco GV
Sistema de bombas de vacío: con inyección de aceite
Gracias a las sinergias entre las tecnologías de aire comprimido y vacío, Atlas Copco diseña y fabrica sus propios sistemas de bomba de vacío, con la misma calidad y fiabilidad que sus compresores. Con la bomba de vacío de tornillo rotativo sellado con aceite GV, Atlas Copco lanza el sistema de bomba para “vacío bajo” entre 0,5 mbar y 500 mbar.
En el corazón de la GV se encuentra el fiable elemento de tornillo. En este rango de presión de trabajo, la tecnología de tornillo rotativo sellado con aceite ofrece el mejor rendimiento con el menor coste energético.
Gracias a su válvula de modulación, instalada en la entrada de la bomba, la capacidad se puede adaptar a la demanda real. Este concepto no sólo minimiza las fluctuaciones de nivel de vacío del sistema, sino que también hace funcionar la bomba en el punto de energía más bajo posible. La bomba de vacío también tiene que arrancar y parar con menor frecuencia, lo que implica menos desgaste y mantenimiento, y en consecuencia, mayor fiabilidad.
La GV ofrece capacidades entre 500 y 5.000 m3/h, lo que la convierte en la máquina ideal para muchas aplicaciones. Desde impresión y envasado hasta plásticos, electrónica, carpintería, embotellado y enlatado, la GV suministra un vacío constante y eficiente.
Gracias a su funcionamiento silencioso, la GV se puede instalar cerca del punto de uso. Pero esta tecnología también permite la instalación remota como parte de un sistema de vacío centralizado.
En el corazón de la GV se encuentra el fiable elemento de tornillo. En este rango de presión de trabajo, la tecnología de tornillo rotativo sellado con aceite ofrece el mejor rendimiento con el menor coste energético.
Gracias a su válvula de modulación, instalada en la entrada de la bomba, la capacidad se puede adaptar a la demanda real. Este concepto no sólo minimiza las fluctuaciones de nivel de vacío del sistema, sino que también hace funcionar la bomba en el punto de energía más bajo posible. La bomba de vacío también tiene que arrancar y parar con menor frecuencia, lo que implica menos desgaste y mantenimiento, y en consecuencia, mayor fiabilidad.
La GV ofrece capacidades entre 500 y 5.000 m3/h, lo que la convierte en la máquina ideal para muchas aplicaciones. Desde impresión y envasado hasta plásticos, electrónica, carpintería, embotellado y enlatado, la GV suministra un vacío constante y eficiente.
Gracias a su funcionamiento silencioso, la GV se puede instalar cerca del punto de uso. Pero esta tecnología también permite la instalación remota como parte de un sistema de vacío centralizado.
