Entrevista con Aitor Jerez, director comercial de Sarenet

Aitor Jerez, director comercial de Sarenet, subraya la importancia de contar con un aliado estratégico en la migración a la nube, más allá de un simple proveedor de servicios. En esta entrevista, destaca que muchas empresas carecen de una estrategia sólida al afrontar este proceso, lo que puede generar complicaciones. Jerez explica cómo Sarenet ofrece soluciones personalizadas y acompañamiento continuo, adaptándose a las necesidades y capacidades tecnológicas de sus clientes.

Lo habitual es que las empresas necesiten algo más que un simple proveedor de servicios en la nube; requieren un aliado estratégico, que les oriente en su camino hacia la digitalización y el uso de soluciones cloud. Aunque muchas organizaciones tienen claro el enfoque de su negocio, a menudo carecen del conocimiento tecnológico necesario para optimizar procesos mediante el uso de la nube. En muchos casos, se encuentran con proveedores que no comprenden esta carencia y ofrecen soluciones sin el soporte adecuado. Es como si una empresa acudiera a una tienda de bricolaje para construir su propia oficina. Encontrarán materiales, herramientas, y tal vez instrucciones básicas, pero carecen del conocimiento y la experiencia necesarios para diseñar y construir el espacio de forma eficiente. Mientras intentan comprender planos y ensamblar estructuras, pierden tiempo y energía que podrían haber invertido en su actividad principal, que no es la construcción, sino hacer crecer su negocio. Por ello, deben buscar un proveedor que se ajuste a su nivel actual de conocimientos tecnológicos y a la experiencia de su equipo. Lo ideal es contar con un socio que no solo proporcione la infraestructura, sino que también ofrezca asesoramiento continuo, ayudando a tomar decisiones informadas y adecuadas a la realidad de la empresa.

Muy pocas empresas disponen de una estrategia sólida cuando se trata de migrar a la nube. En muchos casos, el traslado de cargas de trabajo se realiza sin una planificación adecuada, lo que puede generar muchos problemas durante el proceso. Para evitar estos inconvenientes, es imprescindible hacer un análisis previo que considere la infraestructura actual, los requisitos de seguridad, la compatibilidad de las aplicaciones y el nivel de experiencia del personal. Además, es importante entender que no todas las soluciones pueden trasladarse completamente a la nube. Hay situaciones en las que una estrategia híbrida, que combine soluciones en la nube con sistemas locales, es más adecuada. Entre los factores que obligan a mantener algunos sistemas en local están la falta de compatibilidad de ciertas aplicaciones, normativas que restringen la migración de datos fuera de las instalaciones, o cuestiones de rendimiento y latencia. A pesar de estos retos, las ventajas de la nube suelen ser significativas, incluso si no se puede externalizar todo. Como comentaba anteriormente, para lograr una migración exitosa, es esencial contar con un proveedor que ofrezca un acompañamiento continuo, orientando en cada etapa del proceso.

Un error frecuente que cometen muchas empresas es no comprender que migrar a la nube implica cambiar la forma en que operan algunos servicios. Por ejemplo, mover un sistema que antes estaba en una red interna a un entorno en la nube puede mejorar la accesibilidad para los usuarios externos, pero puede complicar el acceso para los usuarios internos. Por eso, es crucial hacer una evaluación detallada antes de proceder con la migración, ya que una decisión apresurada puede provocar una mala experiencia para ciertos usuarios. Finalmente, muchas organizaciones no priorizan lo suficiente la seguridad al hacer la transición a la nube. Pasar de un entorno controlado localmente a uno gestionado por un proveedor externo requiere reforzar las medidas de protección de los datos. Esto incluye implementar controles de acceso robustos, encriptación de la información y una gestión eficaz de las identidades, además de cumplir con todas las normativas aplicables en materia de seguridad.

Otro problema común es la falta de comprensión clara sobre los costos de los servicios en la nube. Las tarifas pueden ser difíciles de calcular, ya que suelen depender de varios factores, como el volumen de datos transferidos, las ubicaciones geográficas donde se almacenan los datos, y si se trata de transferencias de subida o bajada. Esta complejidad puede dar lugar a sorpresas en las facturas mensuales si no se hace un análisis minucioso de los costos. Lo mejor es contar con un proveedor con tarifas sencillas de entender y saber qué voy a pagar a fin de mes. Nosotros siempre nos hemos alineado con esa filoso fía y así, hemos ido diseñando todas nuestras tarifas; sencillas para que nuestros clientes las entiendan y sin letra pequeña para que duerman tranquilos sin “sorpresas” a fin de mes.

Las situaciones mixtas en las que mezclamos el alquiler de máquinas virtuales en entornos de virtualización tradicionales y el albergue de equipos del cliente en nuestros data center sigue teniendo mucho peso. Aunque siempre estamos en constante evolución para mejorar el rendimiento y la capacidad de nuestra infraestructura, una de las áreas más significativas de crecimiento en nuestro catálogo es la relacionada con el Internet de las Cosas (IoT), tanto en entornos industriales como en el desarrollo de ciudades inteligentes. Estos sectores emergentes generan enormes cantidades de datos que necesitan ser gestionados y analizados con eficacia. En una primera fase, nos enfocamos en capturar, almacenar y visualizar estos datos. Luego, aplicamos inteligencia artificial para obtener valor de esa información y desarrollar modelos predictivos. Todo este camino del dato requiere de colecciones de software en cada fase que el integrador de la solución necesita ir enlazando y desplegando. Con el fin de facilitarles el trabajo hemos creado una plataforma ‘Dédalo’ con un entorno gráfico de usuario en el que arrastrando iconos de aplicaciones a un escritorio desencadenas su instalación y ensamblaje. Lo que antes suponían horas de despliegue ahora se reduce a unos pocos clicks de ratón. Esta nueva realidad ha requerido el uso de tecnologías que no eran tan comunes para nosotros, como los entornos basados en contenedores gestionados con Kubernetes. La adopción de estas tecnologías ha implicado un esfuerzo significativo para simplificar su uso, centrándonos en crear productos operativos y enfocados en ofrecer resultados tangibles a nuestros clientes como en el caso de ‘Dédalo’, permitiendo abstraerse de la complejidad de la infraestructura y de su gestión.

Si preguntas a alguien del sector en qué consisten las soluciones híbridas lo más probable es que esté pensando en cargas en la nube de los hosters más populares conviviendo con aplicaciones alojadas en local, pero en nuestro caso esto va bastante más allá. En nuestro caso hablamos de hibridación en todos los sentidos. En nuestros data center somos capaces de extender redes privadas a nuestros clientes en las que se conectan tanto equipos físicos del cliente como infraestructura virtual que el cliente nos alquila. Somos capaces de ir más allá incluso conectando esas redes de forma privada y segura con las cargas subidas a las nubes de los hosters más populares. En definitiva, extendemos espacios seguros de trabajo a nuestros clientes sobre su propia infraestructura, la de nuestros data center y el de terceros. Eso lo podemos hacer porque somos una empresa en la que confluyen diferentes áreas de negocio como las telecomunicaciones, servicios de data center y ciberseguridad, y contamos con personal técnico propio atendiendo todas estas disciplinas.

Destacaría el crecimiento de servicios que tienen que ver con todas las medidas orientadas a conseguir disponer de un plan de continuidad de negocio: backups remotos, almacenamiento de réplicas y alquiler de infraestructura para levantar servidores en nuestros data center en caso de necesidad. Los servicios que más nos solicitan son el alquiler de infraestructura dedicada, máquinas virtuales en nuestra infraestructura, y servicios listos para usar como puede ser una centralita virtual. También seguimos recibiendo muchas peticiones para alojar equipos en nuestros centros de datos y, en muchas ocasiones, nos piden el diseño y gestión de plataformas privadas a medida, sobre todo de entornos de virtualización exclusivos. En estos casos elegimos la mejor opción para nuestros clientes buscando equipos y las licencias que optimicen el coste.

Internamente hemos tenido que esforzarnos para cumplir con normativas como la ISO 27001 y el Esquema Nacional de Seguridad. Para conseguir estas certificaciones hemos tenido que cambiar procesos internos y adoptar medidas que nos han hecho más seguros a nosotros y a los servicios que prestamos. Actualmente estamos expectantes con la transposición de la NIS 2, otra normativa que estamos obligados cumplir en la misma línea que las anteriores. En cuanto a los servicios, creo que ofrecemos un conjunto de soluciones que cubren todas las necesidades de nuestros clientes. La oferta actual incluye desde los cortafuegos más tradicionales que colocamos delante de las plataformas que albergamos, los especializados en proteger aplicaciones web (WAF), antivirus de última generación de los servidores, esca neos de vulnerabilidades de las plataformas. Incluso hemos desarrollado tecnología propia en nuestra fundación con IA en su core para poner en marcha nuestro sistema de defensa perimetral que permite mitigar ataques de DDoS contra nuestros clientes.

Contamos con un SOC y esto nos obliga a trabajar en contacto con otros SOC intercambiando información y mantenemos relaciones con organismos que nos permiten estar siempre informados y a la última sobre nuevas amenazas. También contamos con un equipo técnico de profesionales en constante formación con certificaciones por parte de los fabricantes. Generalmente la formación viene de la mano de ellos con los que mantenemos una estrecha relación. Algunos con los que trabajamos son: Fortinet, Sophos, Aruba, Nozomi, Veeam, y me dejo en el tintero unos cuantos más que espero que no se enfaden.