Toy Planet reclama mayores ayudas para el comercio
La cadena de tiendas apoya las reivindicaciones de las principales patronales del comercio y la hostelería unidas en la Alianza de Comercio y Hostelería de España.
La situación del comercio generada por la actual crisis económica está teniendo un efecto muy negativo para el comercio. Por ello, la cadena nacional de jugueterías Toy Planet se suma a las reivindicaciones de las principales patronales de estos sectores que se han unido creando la Alianza del Comercio y Hostelería de España. Ignacio Gaspar, director general de la compañía, ha asegurado que “en primer lugar reclamamos medidas compensatorias por los graves perjuicios que están causando las limitaciones de actividad y ayudas directas que permitan a empresas sanas desde un punto de vista comercial y financiero no entrar en una situación negativa por causas totalmente ajenas a su gestión y a su mercado”. Desde el inicio del estado de alarma Toy Planet ha sufrido las restricciones como el resto del comercio, con las medidas que afectaron el 100% de sus tiendas en el primer confinamiento, y al 20% en los últimos meses del 2020.
“Estamos hablando no sólo de negocio, sino de muchas familias. Nuestras empresas asociadas que representan a las más de 200 tiendas que tenemos a nivel nacional son todas Pyme´s, empresas familiares, con el propietario al frente del negocio, trabajando desde que sale hasta que se pone el sol, codo con codo con sus empleados. El comercio es un 13% del PIB, pero más allá de las meras cifras, el comercio ofrece algo intangible que es incalculable en euros pero sí en calidad y estilo de vida y que nos diferencia de todos los sectores. El comercio es el que da vida y alma a las calles, barrios y poblaciones donde vivimos. Una ciudad sin comercio, es un decorado fantasma”, indica Ignacio Gaspar.
Algunas de las medidas que se reclaman ya están siendo aplicadas en varios países europeos, como el incremento del periodo de carencia de los créditos ICO en 12 meses adicionales o las ayudas directas compensatorias, en proporción al descenso de ventas respecto al año anterior. También se demanda prolongar los ERTE hasta diciembre de este año y la posibilidad de flexibilizar la plantilla, con el fin de evitar el cierre de más empresas. Además, se debería promover un periodo de protección jurídica que impida la ejecución de avales o desahucios, como consecuencia de diferencias de abono de rentas, motivados por los procesos de negociación de los contratos. Y, como medidas fiscales, la reducción temporal del IVA, exenciones de algunos impuestos como el IBI, y así facilitar y potenciar el consumo hasta recuperar el volumen de ventas normal.