Las razones del éxito de Frozen
Los críticos de cine y el mercado del licensing tenían sus recelos frente al estreno de Frozen, ya que parecía "más de lo mismo". Sin embargo, la película se ha convertido en todo un fenómeno y, de hecho, desde finales de marzo es la cinta animada más taquillera de la historia, superando a Toy Story 3 con más de 1.200 millones de dólares recaudados. También es la primera película dirigida por una mujer que supera la barrera de los 1.000 millones de taquilla y está en sexta posición en el ranking del total de cintas más taquilleras. No sólo eso: Frozen ganó los Oscar a la mejor canción y a la mejor película animada, el primero para Disney Animation Studio desde que se introdujo la categoría en 2001 (aunque Pixar lleva siete).
Una de las claves del éxito es que ha gustado tanto a niños como a niñas. A pesar de ser una película sobre dos hermanas princesas, factor que hacía que muchos temieran que sólo apelara a niños, el 43% del público del primer fin de semana en Estados Unidos eran niños.
No sólo se trata (seamos optimistas) de que se están superando muchos estereotipos, sino también de que Disney ha publicitado con entusiasmo a Olaf, el muñeco de nieve y contrapunto humorístico, dándole casi tanta presencia como a las protagonistas. Asimismo, se han subvertido algunos de los elementos clásicos de las películas de princesas (hay un principe azul, pero es un villano, por ejemplo). Es decir, se ha intentado actualizar el modelo y se ha cuidado mucho la comunicación y el marketing, para llegar a un público lo más amplio posible.
Los productos licenciados, éxito de ventas
Además de los buenos resultados en taquilla, la propiedad también está cosechando éxitos de ventas en lo que se refiere a los productos licenciados. De hecho, ya es la primera licencia de juguetes en Estados Unidos, según NPD, y en el Reino Unido se están agotando los productos en las tiendas, en especial las muñecas y los disfraces, que también han tenido mucho éxito en España, como se puede leer, por ejemplo, en el informe sobre la campaña de Carnaval publicado en Juguetes B2B.
Algunos analistas esperan que estos artículos licenciados traigan ventas de entre 500 y 1.000 millones de dólares en 2014. No está nada mal, pero de todas formas hay que tener en cuenta que Cars sigue trayendo 2.000 millones anuales y Mickey y Princesas Disney están en los 4.000 millones.
Eso sí, Frozen aún tiene recorrido y aunque la secuela no está confirmada (por supuesto, hay rumores), sí se está trabajando en el musical. Y no es algo secundario, si pensamos en el de El Rey León: este espectáculo se estrenó en 1997 y es el más longevo y más taquillero de Broadway, pero además también está presente en Londres desde 1999 y en Tokio desde 1998, además de haberse estrenado en Los Ángeles, Sydney, Johannesburgo, París, Las Vegas y Madrid, entre otras muchas ciudades.
Y es que de hecho parece que el musical vuelve. Después de una década en la que Pixar dejó bastante de lado la música (en Toy Story incluso hay bromas al respecto), Disney ha recuperado un elemento que permite más visionados, ya que la música no depende de la sorpresa de una trama. De hecho, se han vendido más 2,7 millones de copias de la banda sonora sólo en Estados Unidos, donde ha sido el disco más vendido durante 13 semanas no consecutivas. Es más, el videoclip de la canción ha sido visto en Youtube más de 220 millones de veces, y eso sin contar las versiones, remezclas y parodias.
En definitiva, Frozen supone un retorno a la animación más clásica, después de quince años en los que Pixar nos intentaba sorprender cada año. Pero aun así, o quizás precisamente por eso, se ha convertido en todo un éxito que, por supuesto y como suele ser habitual en Disney, se está trasladando a todos los ámbitos posibles.