Producción sostenible de arroz en Andalucía
Los arrozales de Isla Mayor, en Sevilla, representan un magnífico ejemplo de interrelación entre ecosistemas agrarios y espacios naturales. En el área de influencia del Parque Nacional de Doñana se concentra el mayor área de cultivo de arroz de nuestro país, en concreto 36.000 hectáreas que producen 325.000 toneladas anuales, casi todas ellas bajo técnicas de producción integrada. Los arrozales son además un elemento imprescindible del paisaje natural sirviendo de hábitat para la fauna autóctona, organismos acuáticos y aves.
Coincidiendo con la celebración del año internacional de la Biodiversidad, expertos y medios de comunicación visitaron las plantaciones para descubrir cómo coexisten agricultura y biodiversidad en la zona. Para explicar el importante papel socioeconómico, ecológico y cultural que el cultivo del arroz desempeña en el Guadalquivir, participaron en la jornada José Juan Chans, director gerente del Espacio Natural de Doñana y el profesor Victor M. Muñoz del Departamento de Sociología de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, que coincidieron en señalar la necesidad de consolidar del cultivo del arroz, por tratarse de una actividad que se integra totalmente con los humedales cercanos al Parque y la promoción de iniciativas encaminadas a promover su sostenibilidad a través de las técnicas de Producción Integrada.
Durante la visita, se destacó también el importante papel que un buen uso de fitosanitarios juega en lograr ese equilibrio ya que el cultivo del arroz requiere de cuidados que lo protejan de plagas y enfermedades como la Pudenta, la Pyriculariosis y la Helminthosporiosis. Para ello, los agricultores necesitan contar con las herramientas necesarias para controlarlos y así evitar pérdidas catastróficas, como señaló Manuel Cano, Gerente de la Federación de Arroceros de Sevilla, quien añadió, que las restricciones impuestas por la nueva normativa comunitaria fitosanitaria han eliminado sustancias activas hasta ahora eficaces y seguras sin que exista criterios científicos que lo justifiquen.
Ricardo Alarcón, Jefe de Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura andaluza y Carlos Palomar, Director General de la Asociación Empresarial de protección de cultivos (AEPLA) explicaron los beneficios del uso sostenible de los Productos Fitosanitarios (las medicinas de nuestros cultivos), así como las consecuencias que su reducción genera para nuestros agricultores, una preocupación compartida por la industria y autoridades de la Junta de Andalucía. Por ese motivo, se ha desarrollado un convenio de colaboración, cuya firma está prevista para el próximo viernes 28 de mayo, entre la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía y AEPLA con el objetivo de trabajar juntos para mejorar la disponibilidad de sustancias activas eficientes, consolidar el control integrado de plagas y promover el uso sostenible de productos fitosanitarios.
La visita a Isla Mayor ha sido organizada por la patronal europea de fitosanitarios (ECPA, siglas en inglés) y AEPLA, su homóloga española en colaboración con la Federación de Arroceros de Sevilla. EL evento, sirve además como antesala de la Conferencia sobre Asuntos Reglamentarios que la industria fitosanitaria tiene previsto celebrar en Sevilla el 27 y 28 de mayo.
Según declaraciones de ECPA es necesario tener una visión global de la agricultura de hoy en día: ‘Las generaciones actuales y futuras se enfrentan al reto de alimentar a una cada vez mayor población mundial y preservar la biodiversidad del planeta, para ello resulta indispensable una adecuada gestión de la superficie actualmente destinada a cultivo’, indicó Phil Newton, Director de Comunicación de ECPA.
Fuente: Aepla