Entrevista a Enrique Mota, director general en Iberia de Sandvik Mining and Rock Solutions
El enfoque del Congreso Nacional de Áridos encaja en la idea que Sandvik tiene de la actividad, puesto que la marca sueca apuesta por la comunicación y difusión de los avances tecnológicos que se están incorporando en las explotaciones mineras y de áridos, subraya el director general en Iberia de Sandvik Mining and Rock Solutions, Enrique Mota.
Mota se muestra convencido de que el dinamismo del mercado no se verá frenado por las circunstancias geopolíticas actuales y reivindica el nivel de la minería nacional frente a la de otros países del arco mediterráneo.
¿Qué supone para Sandvik acudir al Congreso Nacional de Áridos, que alcanza aquí en Oviedo su sexta edición?
Este tipo de foros es muy importante para nosotros, porque encaja perfectamente en la idea que tiene la marca de la promoción de nuestros productos y servicios, entre cuyos objetivos está la difusión social del valor añadido que un proveedor como Sandvik aporta.
En este congreso, estamos presentes a través de diferentes canales, tanto en lo que respecta a la promoción directa de máquinas de perforación y trituración y clasificación fijas, como a través de la distribución de equipos de trituración móviles, gracias a la presencia de Finanzauto.
Desde nuestro punto de vista, hay que acudir a este tipo de eventos. Además, en el ámbito de los áridos, Sandvik tiene un papel relevante entre las empresas dedicadas a la perforación y la extracción, así como en nuestra presencia internacional de proyectos de investigación, como Digiecoquarry, por lo que debemos estar presentes en este tipo de citas sectoriales. Además, en este año en el que se retoma la actividad de forma presencial, acudir al encuentro con nuestros clientes y amigos resulta muy agradable.
Enrique Mota, director general en Iberia de Sandvik Mining and Rock Solutions, en el centro de la imagen.
¿Cuál es la coyuntura del sector de los áridos en España?
Desde hace un par de años el sector de los áridos está protagonizando un gran crecimiento gracias al suministro para obra pública. Es cierto que hemos atravesado una etapa valle durante la cual no se invirtió masivamente en equipo nuevo pero llevamos dos o tres años en los que el mercado está empujando con gran fuerza. Estamos logrando bastantes operaciones de perforación y también de trituración. Nosotros, incluso durante la peor parte de la pandemia, cerramos muchas operaciones de obra pública, áridos y minería porque estos sectores mantuvieron su actividad durante los meses de confinamiento. Veníamos de unos años de postcrisis, pero el sector se ha reactivado muy potentemente.
Ese comportamiento tan positivo, ¿se mantendrá en las actuales circunstancias macroeconómicas y geopolíticas?
Sí, creemos que esa demanda al alza se va a mantener. El mercado tiene que actualizarse y potenciar disponibilidades de suministro a nivel local. Yo estoy seguro de que se mantendrá este repunte de la demanda.
¿Aprendió el sector tras la debacle sufrida a partir de 2008? ¿Está ahora más preparado para hacer frente a una contracción de la demanda?
El sector ha cambiado mucho desde que estallara la crisis de 2008. Todos los ámbitos de la actividad se han profesionalizado mucho y la tecnología está cada vez más presente en la toma de decisiones y en la propia gestión en campo, dentro de las explotaciones.
La digitalización de todas las actividades económicas es imparable, también en la minería y la extracción de materiales. ¿Cómo está modificando esta evolución tecnológica las peticiones de las grandes empresas del sector?
Ese factor, el de la digitalización, está muy presente en las operaciones importantes en las que se adquieren paquetes integrados por muchas unidades. En este sentido, nuestro gran valor añadido se encuentra en la profesionalización de esa compra, porque ayudamos a nuestros clientes desde la parte de diseño, la adquisición, asesoría de producto… Sandvik aporta mucho valor añadido que hace que ambas partes, cliente y proveedor, trabajemos de forma muy cercana.
Sandvik es una empresa que apostó hace años por la digitalización de la actividad minera, como atestiguan algunos premios que hemos recibido recientemente. Una empresa de nuestro nivel aporta sostenibilidad, continuidad en el sector y una permanente contribución con mejoras para la sociedad. Además, facilitamos el acceso a la información que aportan nuestras soluciones tecnológicas para que así los usuarios de nuestros equipos utilicen todos los avances que incorporan y así puedan optimizar su utilización gracias a las herramientas que vamos implementando, entre ellas la posibilidad de tener geolocalizadas en todo momento las máquinas y el rendimiento de cada una de ellas.
¿Es factible reducir el impacto medioambiental de la maquinaria que se utiliza en la minería al nivel y en los plazos que propone la Comisión Europea? ¿No son objetivos demasiado ambiciosos?
Respecto a la descarbonización de la actividad minera, creo, en primer lugar, que hay que continuar trabajando intensa y extensivamente para dar a conocer todos lo avances tecnológicos que incorporan las máquinas que se utilizan en las explotaciones mineras y de áridos. Por eso tenemos que hacer un gran esfuerzo en la difusión. Nosotros, por ejemplo, mantenemos acuerdos de colaboración con universidades, centros de formación… Además, participamos en múltiples eventos en los que se divulgue toda la tecnología que viaja con un proveedor de maquinaria para minería o explotaciones de áridos.
Es cierto que hemos de ser capaces de trasladar a todos los agentes presentes en el entorno de la operación minera – desde los políticos, pasando por la administración, prescriptores tecnicos y la propia sociedad - que las soluciones aportadas por un proveedor como Sandvik permiten la reducción del impacto medioambiental de la actividad de nuestros clientes. Pero, desde mi punto de vista, es bueno que empresas como la nuestra operen con las mismas condiciones de contorno que otros fabricantes de equipamiento de uso más generalista o incluso de otro ámbito industrial. De hecho somos capaces de aportar a nuestra sociedad tecnologías y soluciones con mejoras respecto a otros sectores que pueden no ser conocidas por el público general. Este foco constante en la protección de la seguridad y respeto al medioambiente, si se hace visible ante los mencionados grupos de opinión, facilitarán una mejor aceptación de nuestra industria.
El usuario, las administraciones y los políticos conforman un triángulo en el que deben colaborar, compartir información e ir de la mano. Y nosotros vemos en muchas ocasiones que ese triángulo funciona perfectamente. En España también. Y esto es algo que debemos reivindicar, porque en España solemos pensar que la excelencia viene siempre del extranjero. En nuestro caso, en Sandvik, el diseño y fabricación de los equipos es finlandés y/o sueco, pero desde el punto de vista de la aplicación y el conocimiento y también del uso, en España se genera una continua solicitud de información por parte de nuestros clientes porque aquí se va muy por delante frente a operaciones similares que se desarrollan en el arco mediterráneo o en otros países que se suponen más tecnificados. Nuestra capacidad profesional es igual o superior a la de otros países.
La minería mundial ha alcanzado un nivel tecnológico muy alto y, en ese terreno, España no se queda atrás en nada. Hay profesionales que ponen en práctica las soluciones más avanzadas, entre otras razones porque, de la mano de la mejora en seguridad y respeto al medioambiente, se incrementa la rentabilidad de las explotaciones donde nuestros equipos operan.
