El Grupo Siemens ha cerrado el año fiscal 2015 (del 30 de septiembre de 2014 al 30 de septiembre de 2015) con un aumento del 6% tanto en ingresos, que han alcanzado los 75.600 millones de euros, como en pedidos, que representan la cifra de 82.300 millones de euros. El ratio book-to-bill, que mide la relación entre pedidos y facturación y refleja la fortaleza del balance del grupo, se ha situado en 1,09. Excluyendo el efecto tipo de cambio, los pedidos e ingresos se han mantenido estables en comparación con el año fiscal anterior.
Por su parte, el beneficio neto ha sido de 7.380 millones de euros, lo que constituye un incremento del 34,5% respecto al mismo periodo del año anterior. Este fuerte aumento se explica en parte por la contabilización de resultados extraordinarios derivados de las desinversiones en el negocio de audiología y el grupo de electrodomésticos BSH acometidos a comienzos del ejercicio fiscal. Cabe destacar, por áreas de negocio, un fuerte crecimiento del sector Energy Management, junto con un aumento de la actividad en el sector de Healthcare.Todas estas cifras indican un buen comportamiento general del negocio para el presente año fiscal y, pese a la coyuntura macroeconómica, el grupo presenta buenas perspectivas para el año fiscal 2016. El presidente y CEO de Siemens, Joe Kaeser, declaró en este sentido: “Hemos conseguido lo que prometimos, y nos encontramos en una buena posición para lograr nuestros planes para el próximo año”. Según ha adelantado la compañía, el Consejo ha propuesto a la Junta de Accionistas un dividendo de 3,5 euros frente a los 3,30 del pasado ejercicio.
En el actual ciclo histórico de transformación en el umbral de la cuarta revolución industrial, algunas empresas están haciendo un uso intensivo de la tecnología de plataformas