Nuevos tiempos en el mercado de la maquinaria de limpieza viaria
Una de las principales tendencias que se aprecian en el mercado de la maquinaria de limpieza viaria, como en muchos otros ámbitos de equipamiento, es la de incorporar, cada vez más, modelos eléctricos o híbridos. Esto se debe fundamentalmente a la capacidad que ofrecen estas versiones de ahorrar en el consumo de combustible, al reducir o evitar totalmente la dependencia de los recursos energéticos fósiles.
“En Grau Maquinaria hemos apostado claramente por el vehículo eléctrico, entre otros motivos porque los ayuntamientos se están dando cuenta que con estos modelos pueden dar los mismos servicios que estaban dando hasta ahora obteniendo un mayor ahorro, lo que en tiempos de crisis como los que vivimos actualmente, es una gran ventaja”, señala Mª Angels Riera, responsable comercial y de marketing de Grau Maquinaria.
También se aprecia así en Casli, cuyo jefe de producto de Medio Ambiente en la división de maquinaria de la compañía, Javier Herráiz, confirma que “la tendencia en la maquinaria, ya sean barredoras, hidrolimpiadoras u otras, es la de contar con versiones eléctricas, aunque todavía queda camino por recorrer en este ámbito para ganar en autonomía, en rendimiento y en precio de venta respecto a las versiones equipadas con motor convencional”. En este sentido, Karcher (firma que representa Casli) ya ha comenzado a ofrecer las diferentes modalidades de propulsión (gasolina, diésel, gas licuado y eléctrico) en sus barredoras industriales para ir extendiendo estas opciones al resto de la gama.
Desde Nilfisk-Advance, su director comercial para la línea de Distribución en España, Antonio Miguel Hernández, daba un apunte adicional en este sentido: “Con máquinas equipadas con motores híbridos se están logrando ahorros de hasta el 33% en el consumo de gasoil”.
Respeto por el medio ambiente
Al componente económico de los vehículos eléctricos e híbridos se añade también un alto valor ecológico ya que contribuyen a la conservación de nuestro medio ambiente con menores o nulas emisiones de CO2 y acústicas. Este aspecto, como recordaba Mª Angels Riera, cobra cada vez más importancia: “Hasta ahora quizás se hablaba mucho de ello pero realmente no se le daba la importancia que merecía. Sin embargo parece que en estos últimos años la gente está cada vez más concienciada de la importancia del valor ecológico y, a la hora de decantarse por una máquina u otra, lo tiene más en cuenta. Siguiendo esta tendencia, nuestro último desarrollo, el UrbaPlus que presentamos en Tecma, es un vehículo completamente eléctrico (realiza los servicios municipales con un consumo inferior a los 2 euros al día, presenta una autonomía de 100 km y se carga en un enchufe de 220 V)”.
En esta línea, Antonio Miguel Hernández apuntaba otro aspecto importante a tener en cuenta a la hora de adquirir un equipo de limpieza viaria. “Todas las máquinas que nosotros hemos presentado en Tecma son articuladas (salvo una), cuentan con tracción a las cuatro ruedas y equipan motor industrial Tier 3, que permite cumplir con la normativa vigente, quitando el miedo psicológico del Euro 5 y Euro 6, los cuales además encarecen el producto. Consideramos que el cliente puede disfrutar con este motor de un menor consumo de gasoil y evitamos tener que incorporar en nuestras versiones compactas motores que están destinados a maquinaria más grande”.
Máquinas compactas
Otra tendencia que se aprecia claramente en el mercado de la maquinaria de limpieza viaria es la de disponer de productos con dimensiones cada vez más compactas. “Las ciudades cuidan cada vez más sus centros históricos, lugares muchas veces de difícil acceso para la maquinaria de limpieza viaria. En Grau Maquinaria hemos tenido en cuenta estas necesidades y con los nuevos vehículos eléctricos no sólo hemos ganado en acceso y en maniobrabilidad para actuar en calles estrechas, sino que también facilitamos el poder trabajar de forma silenciosa”, dice Mª Angels Riera.
De la misma opinión es Antonio Miguel Hernández, quien aporta el dato que el 70% de las máquinas de limpieza viaria que se venden actualmente en España corresponden a versiones compactas de 2 m3 hacia abajo.
Por su parte, Javier Herráiz, apunta que, a pesar del crecimiento que se aprecia en modelos compactos, los de mayor tamaño seguirán teniendo su hueco en el mercado porque “para la limpieza de grandes calles no se pueden emplear barredoras tan pequeñas sino versiones mayores de 4-5 m3. Cada barredora tiene su aplicación específica y en el caso de las compactas, están especialmente indicadas para poblaciones pequeñas o en aquellas que cuenten con numerosas calles peatonales”.
Polivalencia
El propio Javier Herráiz señalaba a la polivalencia de las máquinas como otra de las principales tendencias, con productos capaces de realizar diversos trabajos intercambiando únicamente sus implementos o accesorios. “El cliente busca un producto que le permita barrer, desbrozar, quitar la nieve de las calles, cortar el césped, transportar material, etc. Auténticos vehículos multiusos que le permitan realizar todas estas tareas adquiriendo una única máquina. Karcher ha trabajado en ello y cuenta ya con equipos que no sólo ofrecen esta polivalencia sino que lo hacen de una forma sencilla para el operador, a la hora de intercambiar estos accesorios y de manejarlos”, indica.
Muy versátil es también el nuevo vehículo eléctrico de Grau Maquinaria, a cuya unidad tractora (UrbaPlus) se puede añadir una amplia variedad de semirremolques (UrbaClic) para hacer frente a numerosos trabajos (barredora, contenedores para recogida selectiva de residuos, tanque de agua de 1.000 litros, plataforma aérea, transporte, etc.).
En cuanto a Nilfisk-Advance, sus últimas creaciones también van en esta línea de polivalencia. “Nuestras máquinas son completamente modulares, con capacidad para intercambiar de forma sencilla diversos implementos y con ello, poder trabajar no sólo en las calles de la ciudad sino también en parques y jardines o en polígonos industriales, entre otros lugares”.
Situación de mercado
Como la gran mayoría de sectores, el de la limpieza viaria también se está viendo seriamente afectado por la situación económica de España y, más concretamente, por las dificultades por las que atraviesan los ayuntamientos y por la dilatación en los pagos a las contratas que realizan los servicios urbanos.
Esta situación, como señala Antonio Miguel Hernández, se ha plasmado en el mes de mayo en una caída interanual en las ventas de maquinaria de limpieza viaria del 72%, y con unas previsiones de matriculación para todo el 2012 que difícilmente llegarán al centenar de unidades.
“No intuimos que vaya a producirse un cambio de tendencia a corto plazo. Mientras no se inyecte dinero a los contratistas que aún no han cobrado, será complicado pensar en posibles renovaciones de parque de maquinaria. En cambio, lo que sí estamos apreciando en el mercado es un incremento en la demanda de equipos de segunda mano, como ha ocurrido en otras partes de Europa”, resumía el responsable de Nilfisk-Advance.
“Hay ayuntamientos que apenas disponen de dinero para adquirir nuevo material – indica por otra parte Mª Angels Riera-, por lo que consideramos que se puede dar un proceso de cambio de mentalidad. Los clientes, en lugar de hacer frente a la nueva situación económica solicitando unidades usadas del mismo tipo a las que venían empleando hasta hora, pueden apostar por cambiar su sistema de trabajo e incorporar otro tipo de productos más económicos. Además, creemos que otra fórmula comercial que va a ganar presencia en este mercado es la del alquiler de maquinaria, actividad que ya estamos estudiando en Grau”.
Desde Casli, Javier Herráiz también apunta en la misma dirección: “Los ayuntamientos siguen debiendo mucho dinero a las empresas de servicios, por lo que para pensar en una recuperación del mercado es imprescindible que primeramente haya un saneamiento en estas administraciones”. Además, señala que este problema no es exclusivo de la limpieza de calles sino que también se ha extendido a los trabajos de saneamiento de las playas, donde Casli es una referencia. “Cuando la economía estaba al alza, se renovaba la maquinaria para la limpieza de playas en un plazo medio de seis años pero, con la irrupción de la crisis, se han alargado estos tiempos. Ahora se presta una mayor atención al mantenimiento de las máquinas y a la formación de los operadores para buscar una mayor vida útil de los equipos. A nivel de ventas, se ha experimentado una caída de mercado de la maquinaria para limpieza de playas, en los últimos 4-5 años, cercana al 60%”.
Grau Maquinaria lleva cerca de 40 años en el mercado de la maquinaria, primero con equipamiento pequeño para la construcción y posteriormente incorporando la línea de limpieza viaria. Es importador y también desarrolla productos propios como el Urba Plus/Clic.
Nilfisk-Advance es una empresa de origen danés, con fábricas en Europa, EEUU, Asia y Sudamérica. El grueso de su facturación procede de la limpieza de interior y, en estos últimos años, también ha ganado presencia en limpieza urbana.
Proceso irreversible
Respecto al temor que puede provocar que la crisis económica conlleve perder el terreno perdido en mecanización de los trabajos de limpieza viaria, desde Casli, Grau Maquinaria y Nilfisk-Advance se desecha la idea. “Una vez que realizas los servicios con maquinaria es difícil cambiar el chip a la gente, incluso al operario. Al fin y al cabo, empleando este tipo de equipos dignificas el trabajo de estas personas, por lo que veo difícil que se vuelva a fórmulas más tradicionales”, indica Antonio Miguel Hernández.
“No creo que la tendencia sea la de recuperar métodos manuales, más bien lo que pasará es que los clientes irán a máquinas cada vez menos sofisticadas, que den menos problemas de averías y más sencillas de usar. Máquinas, en resumen, más fiables”, añade Mª Angels Riera.
Y como conclusión, Javier Herráiz indica que “el operario a pie ha sido, es y será una parte fundamental de la limpieza viaria, una figura imprescindible en diferentes trabajos, por lo que nunca desaparecerá”.