BMW Group inaugura en Hungría su primer taller de pintura sin combustibles fósiles
La nueva planta de BMW Group en Debrecen, Hungría, ha dado un paso importante hacia la sostenibilidad con la construcción de un innovador taller de pintura que será el primero de la compañía en operar sin combustibles fósiles. Este vanguardista taller, que empezará a funcionar a finales de año con la producción de preserie del BMW Neue Klasse, marcará un precedente en la red global de producción de la empresa, alineándose con los principios de la BMW iFACTORY.
El taller de pintura de Debrecen, diseñado para pintar hasta 30 carrocerías de vehículos por hora, destaca no solo por su capacidad productiva, sino también por las avanzadas tecnologías medioambientales implementadas. Con una extensión de 33.000 metros cuadrados y distribuido en tres plantas, este espacio incorpora sistemas de última generación como el power-to-heat, Heat Grid y eRTO, que han sido desarrollados utilizando la experiencia acumulada en otras plantas del grupo.
Uno de los aspectos más revolucionarios de este taller es su capacidad para operar completamente sin gas natural. A diferencia de las plantas anteriores, en Debrecen todos los hornos y procesos relacionados con la pintura funcionarán exclusivamente con electricidad obtenida de fuentes renovables. Este cambio drástico reducirá de manera significativa la huella de carbono, a pesar de que el consumo energético global de la planta aumente debido a la eliminación del gas natural.
El proyecto Heat Grid, una pieza central en la estrategia de eficiencia energética de la planta, permite un ahorro adicional del 10% en consumo de energía. Este sistema se basa en una gran caldera de almacenamiento que aprovecha el calor residual de diversas fuentes dentro del proceso productivo, reutilizándolo para precalentar el circuito de agua. Además, toda la instalación opera con una temperatura de suministro de agua de 65 grados centígrados, considerablemente más baja que los 90-120 grados de las plantas anteriores, lo que optimiza aún más el consumo energético.
Otro avance significativo es la implementación del proceso eRTO (oxidación térmica regenerativa eléctrica), que permite la depuración de gases de escape a altas temperaturas utilizando únicamente electricidad. Este sistema no solo reduce la contaminación atmosférica, sino que también mejora la eficiencia energética gracias a su alta tasa de recuperación térmica.
Además, el taller de pintura utiliza una tecnología de separación en seco automatizada que minimiza el consumo de agua y maximiza el reciclaje de materiales. El exceso de pintura se mezcla con polvo de caliza, lo que permite reutilizar este residuo en otras industrias, como la del cemento, y reduce la necesidad de tratamientos de aguas residuales.
La digitalización juega un papel crucial en el nuevo taller de pintura de Debrecen. Vehículos de guiado automático sin conductor se encargan de transportar las carrocerías entre las diferentes etapas del proceso, mientras que la inspección automática de superficies, basada en inteligencia artificial, detecta posibles defectos tras el pintado y los corrige de manera eficiente. Este nivel de automatización, junto con la planificación virtual previa a la construcción, ha permitido a BMW optimizar tanto la eficiencia como la precisión en la producción.