"No siempre hemos podido repercutir el 100% del incremento de costes en el precio del producto, por lo que, aunque la facturación haya aumentado, los márgenes han disminuido"
Entrevista a Jesús García, adjunto a dirección de Mayper
Mayper ha participado en el Estudio de Mercado de Máquinas de Inyección, Periféricos y Robots que organizamos en Plásticos Universales / Interempresas para obtener los datos de ventas de maquinaria de 2021 en la industria del plástico en España.
Tras el revés de la pandemia en 2020, la leve o notable recuperación en 2021, según cada caso, y un final de año marcado por las consecuencias de la quinta ola, ¿cómo valoraría la actividad de su empresa durante este periodo?
La actividad en este 2021 ha sido bastante mejor de lo esperado. El inicio de la pandemia provocó un nivel de incertidumbre crítico en todos los aspectos, tanto en el ámbito empresarial como en el social, lo que generó mucho temor y revisiones a la baja del volumen de negocio presupuestado. Sin embargo, una vez pasado el verano de 2020, los números acumulados no reflejaban descensos tan críticos como los previstos. Es cierto que 2020 no fue un año como 2019, pero lo esperábamos mucho peor. Esto aportó un pequeño respiro e hizo encarar 2021 con mejores expectativas. El año 2021 no ha defraudado y, pese a todo, ha sido mejor de lo previsto al inicio del mismo.
Jesús García, adjunto a dirección de Mayper.
2021 también ha sido un año marcado por el precio de las materias primas, de la energía y los costes del transporte, ¿cómo cree que estos factores han afectado al sector y de qué manera cree que lo harán en 2022?
El impacto más claro ha sido el incremento en los precios de la maquinaria. En algunos de nuestros productos el coste ha llegado a duplicarse y, en general, podemos estimar un incremento de los costes de producción en torno al 20 - 30%. En muchos casos, no hemos podido repercutir el 100% del incremento de costes en el precio del producto, por lo que, aunque la facturación haya aumentado, los márgenes han disminuido. Respecto al 2022, considero que los precios del producto final tardarán en bajar aún si hubiera un descenso progresivo del precio de las materias primas y suministros.