ANABAC logra la certificación Marine Stewardship Council para atún rabil del océano Atlántico
Tras casi un año de proceso de auditoría, Marine Stewardship Council (MSC) anuncia que la Asociación Nacional de Armadores de Buques Atuneros Congeladores (ANABAC) ha obtenido la certificación MSC para su atún rabil (Thunnus Albacares) pescado a banco libre en el océano Atlántico. Es la primera asociación atunera en Europa que se certifica bajo el estándar de pesquerías de MSC.
El proceso de certificación de esta pesquería comenzó el pasado 30 de junio de 2020 con el anuncio público y la presentación del primer diagnóstico preliminar Announcement Comment Draft Report (ACDR, por sus siglas en inglés). El proceso ha seguido todos los pasos de cualquier evaluación completa bajo el estricto estándar de pesquerías de MSC, incluyendo la revisión por pares, la visita de terreno, el proceso de presentación de alegaciones por parte de todas las partes interesadas y los distintos informes intermedios publicados en la web de MSC.
La asociación ANABAC es la primera asociación europea de atuneros congeladores en conseguir la certificación MSC.
El atún rabil o de aleta amarilla es capturado por los barcos Egaluze, Alboniga, Zuberoa, Playa de Noja, Playa de Bakio, Playa de Ris y Playa de Azkorri propiedad de los grupos Atunsa y Pevasa, y la certificación se ha conseguido para la modalidad de banco libre (no incluye el método de pesca con objetos flotantes). El atún certificado podrá llevar el sello azul de MSC tras haber demostrado la sostenibilidad de la pesquería una vez superado con éxito el más exigente proceso de auditoría pesquera respecto al estándar MSC, tras casi doce meses de evaluación.
El Estándar de Pesquerías de MSC, ampliamente reconocido como el proceso de evaluación de la sostenibilidad de la pesca extractiva más riguroso y creíble del mundo, se basa en tres principios fundamentales: poblaciones saludables de peces; minimización del impacto sobre el medioambiente marino en su conjunto; y un sistema eficaz de gestión pesquera. La certificación de ANABAC ha sido llevada a cabo por el certificador independiente Bureau Veritas para los tres principios mencionados.
“La flota de ANABAC es una parte histórica de la industria pesquera vasca y un agente fundamental en la pesca de gran altura de nuestro país. El Gobierno Vasco ha apoyado y respaldado esta certificación y se congratula de que el sector pesquero vasco se mantenga en la vanguardia de la pesca de más alto estándar ambiental, higiénico-sanitario, social y de cumplimiento de las medidas de gestión y conservación”, ha declarado Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco.
Ignacio Serrats, presidente de Bermeo Tuna World Capital, ha añadido que “si Bermeo es la capital mundial del atún, lo es porque nuestras personas, nuestras empresas y nuestras instituciones tienen interiorizado que el presente y el futuro de la cadena de valor del atún pasan por la consecución de este tipo de objetivos como el que ha alcanzado la flota de ANABAC en el día de hoy”.
Por su lado, Laura Rodríguez, directora de MSC para España y Portugal, ha querido felicitar a la asociación y a las empresas Atunsa y Pevasa por la certificación de sus capturas de atún rabil en el Atlántico: “El atún rabil es una de las especies más consumidas en nuestro país y es vital asegurar que procede de un origen sostenible. El paso dado por ANABAC es sin duda una buena noticia para los océanos y para la ciudadanía comprometida con el consumo responsable de pescado”.
Por último, el presidente de la asociación ANABAC, Borja Soroa, ha concluido: “Esta certificación MSC para el rabil del Atlántico capturado sin dispositivos de concentración de peces supone un gran paso hacia el objetivo de certificar la totalidad de las capturas realizadas por nuestra flota. Acometer un proceso tan complejo y exigente como la certificación MSC es para nuestras empresas asociadas un ejercicio de transparencia de nuestra gestión y de nuestra producción. Una clara forma de demostrar nuestro compromiso con el ejercicio de una pesca responsable y sostenible que garantice la continuidad del recurso y de nuestra actividad para futuras generaciones de consumidores y arrantzales”.