La luz para crear un salón de belleza que evoca calma y arte visual
Neil Barton, reconocido hair styler de Edimburgo, decidió trasladarse a la ciudad de Marbella, donde quería instalar un salón muy especial. Para ello eligió al estudio de Carolina Gual, quien ha creado un espacio de belleza minimal, como si se tratara de una galería de arte, donde el trabajo realizado para cada cliente es único, donde la iluminación juega un papel muy importante, para mostrar el arte en los servicios de peluquería y estética.
Una de las limitaciones del proyecto estaba en el propio espacio, de reducidas dimensiones, al que se decidió dar una continuidad espacial creando un ambiente abierto y diáfano. El toque unificador se logra a través del uso del mismo color y materiales en todo el local. De este modo, el blanco de las paredes funciona como un lienzo en blanco y favorece la reflexión de la luz, a la vez que crea una atmósfera relajante para el cliente.
Además, se usó el DM barnizado como material principal del mobiliario, en una especie de brutalismo constructivo. De hecho, todo el mobiliario, excepto los espejos, las sillas y los lavacabezas, se han diseñado especialmente para este proyecto.
Asimismo, un mostrador curvo recibe al visitante al entrar y articula el espacio, dejando a los lados los tocadores que quedan enfrentados a las paredes a ambos lados, usando una bancada continua como elemento de apoyo para los mismos, a la vez que sirve de protección de la pared frente a la suciedad.
Tras el mostrador se encuentra otro elemento divisor del espacio, un mueble a medida que se usa de zona de espera a un lado y, por el otro, sirve como mueble de almacenaje para los carros y utensilios de peluquería, pero también funciona como peana de exposición de esculturas.
Detalle de las luminarias de Oliva para contribuir a la iluminación técnica en suspensión, en combinación con las lineales de la zona de tocadores para enfatizar el bienestar del local.
Tras el espacio principal de tocadores se encuentra la zona de lavacabezas, a la que se ha querido dar un poco de intimidad usando un separador realizado en el mismo material que el resto de mobiliario y prescindiendo de cristal o elementos que cierren el espacio, de modo que actúa como una especie de celosía que deja ver y pasar la luz, pero da cierta sensación de privacidad. Al fondo del local se encuentran los accesos al aseo y a la zona de preparación del color, en cuartos independientes.
Inspiración y bienestar
La iluminación cobra una importancia especial en este proyecto. Al entrar al local sobre la recepción una luminaria da la bienvenida y funciona como una escultura de luz. Los tocadores, a su vez, cuentan con iluminación técnica desde arriba, pero se ha querido enfatizar cada puesto usando unas linestras de luz cálidas a los lados de los espejos.
En la zona de lavacabezas se ha conseguido una iluminación íntima y acogedora con un foseado de luz en la pared posterior y se ha colocado la lámpara Atollo Vetro como elemento de diseño singular.
Finalmente, comentar que la fachada es de líneas sencillas, cuyo tono gris neutro permite crear ese elemento que no distraiga del interior del local, que es el verdadero protagonista del proyecto.
Créditos
- Nombre del proyecto: Neil Barton Marbella.
- Nombre de estudio de interiorismo: Carolina Gual.
- Año: 2023.
- Superficie construida: 70 m².
- Fotografía: Stefan Randholm.
- Iluminación: Oliva Iluminación.
- Mobiliario peluquería: Comfortel Furniture.
- Materiales: DM, suelo vinílico.
- Mobiliario: Carolina Gual, Comfortel, Zara Home.