Coreografías lumínicas con drones
En este contexto, uno de los nichos de mercado que más sufrió por el coronavirus y que ahora despegará definitivamente es el de la industria de los drones, cada vez más presente en eventos multitudinarios. Según fuentes del sector, la industria cultural y el marketing permitirán al sector de los drones crecer en los próximos diez años a un ritmo de un 10% anual.
Flock Drone Art es una de las empresas de referencia en la utilización de drones en espectáculos. En los últimos 2 años ha puesto a volar drones en más de 20 eventos, llenando el cielo de luces suspendidas, creando efectos ilusionantes.
Esta startup fundada en 2019 utiliza la tecnología dron para ofrecer espectáculos de luz con vuelos sincronizados de diferentes drones. Desde sus oficinas de Barcelona, Girona y Madrid gestionan una media de 10 espectáculos anuales y espera crecer hasta una 200% en 2022. Con una facturación de 250.000 euros anuales da empleo a 12 personas.
De la pirotecnia al dron
La innovación en los espectáculos de pirotecnia pasa por añadir vuelos con enjambres de drones de luz. Esto será una de las tendencias que más crecerá en el ámbito de los eventos multitudinarios en los próximos años. Según explican desde Flock Drone Art cada vez son más las instituciones públicas, como los ayuntamientos, que demandan este servicio, que piden una innovación y actualización de las celebraciones. “Son muchas las ventajas que ofrece esta apuesta: son seguros, no contaminan y no generan ruido ambiental, evitando con ello los trastornos ocasionados en animales y personas”.
El espectáculo de luz de Flock Drone Art, que se pudo ver en Lloret de Mar (Costa Brava), recibió el premio internacional UGCS en 2021.
Una compañía de reconocimiento internacional que en 2021 obtuvo el premio internacional que organiza la empresa UGCS a los mejores Drone Shows. Flock Drone Art se presentó a una convovcatoria, en la que participación más de 210 propuestas, con un espectáculo de luz y drones que sobrevolaba la playa de Lloret de Mar (Costa Brava).
Para ello, emplearon un enjambre de 100 drones, donde cada dron dispone de una potente luz conformando píxeles para dibujar imágenes de la vida submarina como una ballena o medusas, creando una ilusionante coreografía en el cielo. Un gran espectáculo lumínico.