“La belleza por la simplicidad de la Colección Simon 270 reside en su neutralidad”

La evolución del diseño en Simon se explica por la voluntad de hacer buenos productos desde el momento en que se piensa en ellos. Durante estos 105 años de historia para Simon, el diseño como disciplina ha evolucionado mientras se fue acumulando toda una gran experiencia en la compañía. Hoy el diseño se trata como un compendio de los valores que siempre han formado parte de su ADN: el diseño se integra completamente en el proceso de creación de los productos convirtiéndose, junto con la innovación y la tecnología, en una constante estratégica de la firma.

Simon 270 no es solo la última gran apuesta de Simon, es uno de los máximos exponentes de la firma en cuanto a respeto por el diseño. Salvi Plaja, director de Diseño de Simon comparte su visión cuando apunta que “habitualmente los diseños simples son los más complicados” y que “la belleza por la simplicidad de la Colección Simon 270 reside en su neutralidad”.

Simplificar tiene que ver con prescindir de lo accesorio. Como proceso de diseño, se han eliminado todos aquellos elementos innecesarios, reduciendo el grosor de los marcos un 35% y quitando cualquier tipo de escalón. De este modo se logra la integración perfecta del marco con la pared. Tanto los acabados como los materiales se han unificado en los marcos y las teclas para lograr un diseño ligero pero robusto.

Estética Icon

Simon 270 presenta Icon como una estética reinventada. De diseño neutro y cero intrusiva, se integra tan bien en cualquier espacio que parece que siempre hubiera estado ahí. El diseño de Icon, también en su versión conectiva, es auténticamente atemporal.

Estética Mínima

Un buen diseño es el que tiene el menor diseño posible. Es el caso de Mínima: su tecla es esbelta y el Clean schuko se enrasan con la pared buscando la mínima intrusión y la máxima funcionalidad. Una sola superficie lisa y continua donde las juntas son imperceptibles. Minimalismo en su máxima esencia.

La practicidad no está reñida con la estética. En esta colección, los diferentes mecanismos de mando tienen la misma usabilidad y son de pulsación progresiva. Toda la superficie de la tecla es útil y ofrece un tacto uniforme con un recorrido de accionamiento corto y preciso. Además, su mecanismo 100% pulsante hace que las teclas vuelvan a la misma posición, quedando siempre en perfecto orden y armonía.

La simplificación de Simon 270 alcanza incluso el proceso de instalación. Se han mejorado las conexiones eléctricas y las fijaciones mecánicas, además de incluir un bastidor metálico de fácil colocación.

Los bastidores metálicos múltiples en la colección Simon 270 aseguran una instalación alineada que garantiza la seguridad y robustez del mecanismo en la pared. Cuentan con un clipaje preciso y fácil de instalar, además de un soporte rígido para un acabado perfecto.

Simon 270 dispone de cajas de superficie, más compactas y planas, aptas para paredes que no permiten empotramiento o espacios donde se busque una clara estética industrial.

Toda la colección se compone a partir de tres elementos principales: los mecanismos, los marcos y los bastidores. Tanto los marcos como los bastidores son modulares, pudiéndose configurar con las funciones que se quieran integrar.

Simplificar también significa minimizar el impacto medioambiental. Por eso se ha eliminado el plástico de todos los envoltorios de la colección Simon 270. Por primera vez, están impresos con menos tintas ya que presenta pequeños detalles en azul, evitando así la impresión monocolor total. Además, están elaborados con materiales 100% reciclados. Un nuevo concepto más simplificado, honesto y respetuoso con el planeta que ha sido merecedor de un iF Design Award en la categoría de packaging este 2021.