La iluminación LED redescubre a los artistas de Arco
La iluminación eficiente se abre paso en el mundo del arte, como ha demostrado la edición de 2019 de Arco, una de las ferias de arte más importantes, la primera en contar con, aproximadamente, 2.500 proyectores LED para iluminar varios pabellones del recinto. Este cambio ha sido posible gracias al Grupo Marva, proveedor oficial de Ifema para el diseño, producción, decoración y montaje de la feria, que incorpora los proyectores LED sostenibles y de bajo con sumo fabricados por Roblan, la compañía española experta en iluminación LED.
Este año ha sido la primera vez en la historia que Arco ha contado con un sistema de iluminación sostenible, evitando así el uso de lineales halógenos, que destacan por su alto consumo y el calor que generan al visitante y al expositor, y sustituyéndolos por una instalación LED de bajo consumo y alto rendimiento. Esta decisión también deriva de la directiva de la UE que prohíbe la fabricación de halógenos por ser una fuente de luz poco eficiente.
“La instalación de estos 2.500 proyectores LED en la feria de Arco permitirá lograr un equilibrio perfecto entre la iluminación, los espectadores y las obras”, destacaba Raquel Pereira, responsable de comunicación de Roblan, antes del inicio de la feria.
Hasta la fecha, tanto halógenos como fluorescencias eran los sistemas más utilizados en exposiciones de arte, ya que, en comparación con los LED convencionales, consiguen un índice de reproducción cromática (IRC) más elevado. Sin embargo, estos nuevos proyectores de Roblan superan los niveles de calidad de los productos instalados en ediciones anteriores de la exposición. El sistema tiene un diseño compacto con una carcasa y cable blanco que se camufla y fusiona perfectamente con el entorno, permitiendo que las obras expuestas luzcan por sí mismas, sin generar otras distracciones a los visitantes. Además, incorpora la última tecnología en chips de LED de alto rendimiento que logran una reproducción excelente de colores –CRI de 90–, generando un entorno de luz natural que permite observar las obras con una nitidez absoluta.
En palabras de Pedro González, director del Área Comercial y de Marketing del Grupo Marva, “hemos decidido instalar estos proyectores en la feria de Arco dado que creemos que cumplen con las especificaciones concretas de la feria y las altas exigencias en cuanto a su apariencia, rendimiento, consumo y vida útil. El proyector de Roblan ha logrado incorporar todos estos requisitos en un producto elegante y práctico, permitiendo además instalar un sistema de iluminación más eficiente y sostenible, replicable en otros proyectos de este calado”.
En relación al ahorro y la sostenibilidad, según fuentes citadas, se calcula que esta instalación supone un ahorro energético de alrededor de 11.500 euros durante los once días de montaje y exposición. Con esta tecnología se ahorra un 83% en potencia eléctrica consumida y se reducen los gastos de climatización, ya que la luz LED genera un 60% menos de calor que el halógeno, que generan 80% de calor y 20% de luz, suponiendo una mejora también en el bienestar del visitante. Además, este sistema permite reducir el gasto de mantenimiento, ya que la vida útil del proyector LED que se extiende hasta las 35.000 horas, frente a las 2.000 del halógeno lineal, que requiere un reemplazo frecuente.
Esta apuesta del Grupo Marva es un paso firme adelante hacia la sostenibilidad en grandes montajes e instalaciones, como ahora se ha podido observar en Arco con los proyectores de Roblan, permitiendo un alto ahorro en potencia consumida, una mayor eficiencia en el alumbrado (iluminando directamente los objetos deseados y reduciendo la pérdida de luz a otros espacios, como el techo) y una reducción de los deslumbramientos hacia el visitante, ya que se genera una luz difusa y sin sombras.