Alimentos funcionales probióticos a partir de frutos secos
22 de julio de 2005
Un grupo de investigación del Instituto de Agroquímica y Tecnología de alimentos del CSIC, ha desarrollado y patentado un alimento funcional probiótico a partir de frutos secos como la almendra, la avellana o la chufa. El resultado es de aspecto parecido al yogur líquido, y sirve como alternativa a la leche y sus productos derivados, de modo que pueden consumirlo personas intolerantes a la lactosa
Un grupo de investigación del Instituto de Agroquímica y Tecnología de alimentos perteneciente al CSIC, ha desarrollado y patentado un alimento funcional probiótico a partir de frutos secos como la almendra, la avellana o la chufa.
En los últimos años se han comercializado numerosos alimentos funcionales, que incorporan una serie de componentes que se consideran beneficiosos para la salud, mejorando las funciones de determinados órganos y tejidos o previniendo enfermedades. En el ámbito de lácteos y similares, la presencia y diversidad de los alimentos funcionales ha crecido significativamente en el mercado.
Un grupo de investigación del Instituto de Agroquímica y Tecnología de alimentos perteneciente al CSIC, ha desarrollado y patentado un alimento funcional probiótico a partir de frutos secos como la almendra, la avellana o la chufa. El resultado es un producto de aspecto parecido al yogur líquido, que sirve como alternativa a la leche y sus productos derivados, de modo que pueden consumirlo personas intolerantes a la lactosa.
El alimento desarrollado contiene ácidos grasos Omega-3 y fitoesteroles, ayudando así a controlar el colesterol. Además, dado que el alimento se produce a partir de frutos secos, posee un alto poder nutricional, conteniendo ácido fólico, Vitamina E, que funciona como antioxidante natural, y Vitaminas del grupo B, que no están presentes en la leche.
Durante el proceso de fermentación, a la lechada obtenida de los frutos secos batidos, se le añaden bacterias prebióticas, como Bifidus y Lactobacilus acidofilus, que aportan otras características positivas al alimento final, contribuyendo a reforzar el sistema inmune del organismo. Los investigadores están estudiando también la adición de otras sustancias como fibras, calcio u otros componentes con el fin de aumentar los efectos beneficiosos del alimento obtenido. Además, según los responsables de la investigación, las cualidades organolépticas del producto desarrollado son muy satisfactorias, variando ligeramente en función del fruto seco elegido como materia prima, y podría constituirse como una alternativa a la leche de soja, principal sustituto en la actualidad de la leche de origen animal en el mercado.Los alimentos elaborados de manera artesanal y característicos de un área geográfica determinada son actualmente muy valorados por los consumidores, tanto por sus características artesanales como por su identificación como producto “típico” y "natural".
Las propiedades nutritivas de la leche de cabra y sus derivados, haciendo palpable la utilidad de las herramientas de caracterización del ADN en el estudio de los productos agroalimentarios.
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