“El cooperativismo agrario está más vivo que nunca“
Extracto de un diálogo mantenido con Eduardo Baamonde, Director General de la Confederación de Cooperativas Agrarias de España. La entrevista completa puede leerse en www.ediho.es/revista157.html
¿Qué valoración nos puede dar sobre la salud del cooperativismo agrario durante el año 2001?
Estamos observando que las cooperativas se están especializando y se está produciendo una profesionalización en la gestión de la cooperativa como empresa, así como también en sus respectivos socios. Al mismo tiempo, las empresas cooperativas se están adaptando a las exigencias que les marcan los mercados en cuanto a parámetros tan importantes como la calidad, presentación del producto, calibre, etcétera.
Se están llevando a cabo grandes avances en la capitalización de las cooperativas, tanto en las estructuras productivas de los socios de éstas como en las propias estructuras de comercialización de estas empresas. Además, se ha invertido mucho dinero en estructuras propias y en mejorar y hacer más competitivas y rentables las explotaciones de sus socios.
Por tanto, creo firmemente que el cooperativismo agrario español está más vivo que nunca, afrontando con dinamismo su presente para adaptarse al futuro apostando por la especialización y el reciclaje profesional tanto de sus mandos intermedios como de los cuadros directivos que forman estas empresas.
El porvenir de las empresas cooperativas se vislumbra en base a un incremento significativo de los niveles de competitividad, lo que pasa obligatoriamente por un ágil y dinámico proceso de modernización de las estructuras, que repercuta en adquirir una dimensión profesional adecuada para competir en los mercados internacionales.
Por su parte, en los últimos años la facturación de las cooperativas ha estado por encima del crecimiento de valor de la producción real agraria de nuestro país situándose, durante el pasado año 2000, en los 2 billones de pesetas.
¿Cuáles son los puntos todavía débiles del sector cooperativo español?
Hay que partir de un razonamiento lógico que pasa por asimilar que las cooperativas no están solas en el mercado. Si analizamos el sector cooperativo encontramos que se caracteriza por disponer de una dimensión social y también económica. Por ende, creo que las cooperativas agrarias están trabajando con mucha fuerza e interés en los últimos tiempos en la concentración de la oferta, con el fin de que los productores puedan disponer de un mayor poder de negociación y consolidar estrategias comerciales que sitúen a estas entidades en un mejor posicionamiento comercial en los circuitos europeos.
Cada año, se están incorporando más agricultores a las cooperativas ya que éstas ofrecen una gestión eficaz y una rentabilidad para las producciones de sus asociados. El incremento en el nivel de socios integrados dentro de cooperativas también obliga a estas entidades a que consigan llevar a cabo estrategias de conjunto, para lo que es necesario que las mismas estén unidas y concentren muchísimo más su oferta.
¿Considera que la OCM en Frutas y Hortalizas ha sido positiva con los intereses del sector cooperativo?
Cuando se aprobó la reforma de la OCM en 1996, se hizo especial hincapié en la evidente necesidad que había de concentrar la oferta y de incentivar la creación de OPFH´s (Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas). Sin embargo, hay que reconocer que el desarrollo de esta OCM ha caminado hacia una excesiva complejidad y con distintas interpretaciones en las distintas comunidades autónomas y en los diferentes Estados miembros.
Cabe señalar en primer lugar que existe una gran distorsión entre las organizaciones de productores a nivel comunitario a medida en que unas acciones de estas organizaciones son autorizadas en unas zonas y en otras prohibidas.
En un segundo apartado, podemos resaltar que no se están aprovechando todos los recursos disponibles en esta OCM y a la hora de diseñar los programas operativos se interpretan de una manera por los funcionarios y siendo totalmente distintas las necesidades reales de las organizaciones de productores.
Hay que actuar con más flexibilidad ante la reducción de los programas operativos y considerar a las organizaciones de productores mayores de edad y responsables de los programas que gestionan.
La mejor garantía de que los programas operativos se hagan de acuerdo con la filosofía de la OCM es que los criterios de reconocimiento de estas organizaciones de productores pasen exclusivamente por que este tipo de organizaciones estén formadas realmente por productores.
¿Cree que la política agraria europea ha favorecido los intereses del cooperativismo agrario español?
Desgraciadamente, España se incorporó tarde a la antigua CEE (Comunidad Económica Europea), actualmente UE, llegando en un momento en el que muchas medidas de la PAC estaban en fase de desmantelamiento.
Desde el inicio hasta 1.986, si favoreció y permitió en España un refuerzo de las estructuras cooperativas. Sin embargo, posteriormente se pasa de una PAC que apoya las rentas de los agricultores a una segunda fase en la que han disminuido el apoyo a las cooperativas y, también, a las estructuras comerciales.
¿Porqué el asociacionismo cooperativo es una fórmula que no ha pasado de las cooperativas base?
La integración de cooperativas es un proceso paulatino pero real que se está produciendo en muchas zonas de la geografía española. En este caso, el proceso de integración se produce mediante la creación de cooperativas de segundo grado, fusiones de cooperativas base y la puesta en marcha de consorcios cooperativos. Por tanto, las cooperativas base son las primeras empresas que tienen que dar el paso para que la integración y la unión de cooperativas sea no solamente teoría sino un hecho real y tangible.
La evolución de las cooperativas ha sido progresiva y como las cooperativas son empresas que están muy ligadas al territorio, la integración y fusión de cooperativas son aspectos que van a determinar la nueva etapa de las cooperativas que tras haberse profesionalizado están trabajando en la obtención de valor añadido a sus productos en base a la aplicación de técnicas de producción integrada y del cultivo de productos ecológicos, que respetan el medio ambiente y son naturales.
¿Cómo se perfila el futuro del cooperativismo agrario español dentro del marco del nuevo sistema monetario europeo?
Las cooperativas van a afrontar el Euro y el nuevo sistema monetario europeo como cualquier otro tipo de empresas. Está claro que el Euro va a permitir reforzar nuestra posición en el mercado e incrementar el consumo de frutas y hortalizas en los principales mercados consumidores de la Unión Europea.