Entrevista a Serge Caussanel

"Las casas de semillas tenemos una gran responsabilidad por estar al principio de la cadena".

Desde primeros de junio se hace cargo de la dirección general de Clause-Tezier Ibérica S.A. ¿A qué se debe este cambio?

El cambio obedece a una evolución normal en las carreras profesionales, tanto en la de Jean Paul Chamoux como en la mía. Jean Paul Chamoux pasa a la dirección de ventas en Francia de las dos empresas, Clause y Tezier, y yo de la filial Clause-Tezier Ibérica S.A. en España y Portugal.
Hay que tener en cuenta que en Francia se mantiene la estructura de Clause y de Tezier como dos empresas independientes, pero con una dirección de ventas compartida, en este caso, a cargo de Jean Paul Chamoux. Para España y Portugal, en 1997 se decide fusionar las dos empresas con una única estructura y actuando como filial bajo el nombre Clause-Tezier Ibérica, la cual dirijo actualmente.

Como multinacional, ¿qué autonomía posee Clause Tezier Ibérica S.A. con respecto a la sede central de cara a proyectar su trabajo?

El nivel es diferente en función de las diferentes divisiones. En el departamento comercial tenemos mucha autonomía para constituir la gama varietal, ya que aquí experimentamos las variedades, decidimos su introducción o no en catálogo y para qué segmento las vamos a dirigir, en qué cantidad, etc. aunque también, como es lógico, trabajamos en estrecha relación con el equipo europeo. Recordemos que las producciones en España se encuentran muy vinculadas con la respuesta de aceptación en los países centroeuropeos o de nuestro entorno.
En la producción de semillas y de la investigación, el nivel es distinto. Los centros de producción e investigación de España trabajan en conexión con los centros de dirección de Francia de cara a ejecutar los programas establecidos.

Ante la evolución constante de este negocio, ¿cuál es la política que va a implantar en la empresa?

Básicamente, una política centrada en el desarrollo de las variedades adaptadas para la producción en el mercado ibérico, pero, además, con aceptación en el consumo en los mercados de destino. En este punto, damos importancia al consumo del mercado interior y exterior.
Para ello, hay que apoyarse primero en la investigación, en la búsqueda de estas variedades. Así, existe una comunicación constante entre los departamentos comerciales e investigación, de forma que comerciales y genetistas posean flujos de información útiles. Hay que determinar la variedad que aporte valor en toda la cadena, tanto en la productiva con respuesta a las técnicas empleadas como en la comercial que permita un valor añadido. Se trata de conseguir variedades de segmentos.
Dentro del equipo de desarrollo hay profesionales de seguimiento de respuesta que trabajan estrechamente con una red de productores que ensayan estas nuevas variedades en sus fincas. De esta forma, tras dos o tres años de pruebas y, una vez evaluadas sus cualidades, son incluidas en catálogo.
Es importante tomarse el tiempo necesario para ver las características varietales de cara a establecer el adecuado calendario de zonas de producción, fechas de cultivo, etc. y conectarlas con los mercados que, en verdad, valoran estas cualidades, puesto que sólo así van a poder expresar estas virtudes.

Cada empresa de semillas posee un catálogo varietal personal. ¿Cuáles son las principales fuerzas de la empresa en el panorama hortícola de España y Portugal?

Nosotros trabajamos en diferentes líneas de productos. Por orden de importancia, podemos mencionar melones, coliflor, pimientos, calabacín, tomates, pepino, zanahoria, escarola y lechuga. En cada producto trabajamos la gama y en algunos de ellos es muy completa.
Entre nuestra amplia oferta, en melón, por ejemplo, tenemos fuerza en tipo amarillo para las zonas de Almería, con variedades de referencia como "Yalo F1", tipo Charentais para Murcia, Alicante, Sevilla y Málaga, tipo Charentais larga vida para Almería, tipo Galia para Murcia y Alicante con variedades como "Yucatán F1", tipo Piel de Sapo para cultivo en invernadero en Almería como la variedad "Balboa F1", etc., gamas con productos dirigidos a mercados muy concretos en los que sabemos qué hay que ofrecer porque sabemos qué necesitan.
En coliflores se trata de calendarios y ahí tenemos variedades muy bien introducidas, como "Aviso F1", "Meridien F1", Nautilus F1"... incluso variedades para mercados concretos tipos romanesco o las de color verde como "Trevi F1".
En el caso de los pimientos, los tipos cuadrados amarillos en madurez como "Olimpo F1" y los demás tipos como lamuyos rojo en madurez, lamuyos amarillos en madurez, tipo dulce italiano y picantes.
En tomates, los de porte indeterminados como "Delicia F1" y "Xenon F1", de porte rastrero como "Baghera F1", los de industria como "NautilusF1". En calabacines, de los tipos verdes como "Cora F1", "Tosca F1", ... y de los blancos como "Noval F1". En definitiva, tipos y variedades reconocidas que nos permiten una diferenciación en el mercado.

A un tiempo vista, ¿cómo ve el mercado hortícola español y portugués por zonas relevantes?

El mercado productor español tiene un potencial de crecimiento muy importante. Es un mercado con una fuerza de exportación muy clara hacia los mercados europeos y con posibilidad de incrementar sus volúmenes actuales y sus calendarios de comercio. Asimismo, España tiene una gran fuerza de adaptación a estos mercado y ahí radica otra de sus grandes oportunidades.
El punto clave de este potencial también está en el desarrollo, en la cultura de consumo, basados en dos valores: para el consumidor, el sabor y la salud y para el distribuidor, el sabor y la garantía de calidad. Toda la cadena trabaja en esta dirección y las casas de semillas tenemos una gran responsabilidad por estar al principio de la cadena. Así, tenemos que producir variedades más resistentes que necesiten menos tratamientos, mejorar el sabor de las frutas y legumbres y subir los niveles de productividad para bajar costes.
En el caso de Portugal, este ha bajado su producción en varios segmentos. Aunque actualmente está mutando incrementando especialidades, es igualmente un buen proveedor y posee, con las actuales adaptaciones, unas nuevas perspectivas.

Ante tanto y continuo cambio de reestructuraciones de empresas dedicadas al mercado de las semillas hortícolas, ¿cómo ve el futuro más inmediato de forma general? ¿Y con respecto a su empresa?

El futuro ante estos continuos cambios lo vemos tranquilo, principalmente por nuestra cultura alrededor de la semilla. Recordemos que pertenecemos al grupo Limagrain, que, entre sus peculiaridades, tiene como única actividad el mundo de la semilla. Un grupo que vive y trabaja en la semilla. Sólo podemos destacar como anécdota una de las líneas del grupo vinculada con la transformación de cereales para transformado de pan.
Por lo tanto, es un grupo de empresas de semillas y esto es fundamental de cara a tener mucha seguridad en sí mismo, además de una credibilidad hacia fuera. Estamos acostumbrados a vivir al ritmo de la variedad, ritmo que necesita mucho tiempo e inversión en todo lo que se hace. Con esta cultura de la semilla, trabajamos con el tiempo, el conocimiento y las particularidades que la semilla obliga.