Dentro de los últimos avances del proyecto, se generaron las etiquetas inteligentes para tomate Cherry Lobello y sandía Premium en las instalaciones de producción de Caparrós Nature
Avances en el proyecto eTIC4FOOD para el etiquetado inteligente de frutas y hortalizas sostenibles
GRUPOS OPERATIVOS DE LA ASOCIACIÓN EUROPEA PARA LA INNOVACIÓN
Centro Tecnológico Tecnova, Grupo Hispatec, Grupo Caparrós, Parque Científico-Tecnológico de Almería
30/10/2023El objetivo principal del proyecto eTIC4FOOD se ha centrado en el diseño, desarrollo y validación de una etiqueta inteligente para productos hortofrutícolas basada en las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). Así, con este proyecto se pretende mejorar la accesibilidad de la información sobre los alimentos que consumimos.
En los últimos años, ha habido un cambio significativo en la forma en que las personas consumen alimentos. Este cambio se ha centrado en una mayor conciencia de la salud, la preocupación por el medio ambiente y la sostenibilidad, así como las implicaciones éticas de su producción y/o elaboración. Este cambio ha llevado a un aumento en la demanda de alimentos orgánicos, productos locales y opciones de alimentos más saludables. En este sentido, los consumidores quieren saber de dónde provienen los alimentos, cómo se producen y si siguen prácticas éticas en su fabricación.
Además, la pandemia de COVID-19 ha puesto de relieve la importancia de la seguridad alimentaria para los consumidores. Ahora más que nunca, las personas son conscientes de la necesidad de contar con un sistema alimentario seguro y fiable. En este sentido, la trazabilidad de los alimentos y la garantía de la seguridad de los productos son prioridades para los consumidores.
A pesar de la importancia de la transparencia y la disponibilidad de información para los consumidores, aún existen desafíos en el acceso a la misma. Algunos de estos desafíos incluyen la complejidad de la información en las etiquetas, la falta de estándares uniformes para la presentación de información y la limitación de espacio en las etiquetas para incluir todos los detalles relevantes.
Además, en el caso de los productos hortofrutícolas, uno de los principales escollos de su comercialización es la venta de estos bajo marcas y sellos de terceros (principalmente de supermercados y grandes superficies de venta), quedando por tanto un espacio reducido dentro de la propia etiqueta para la información relativa al origen del producto.
Así, es fundamental garantizar que la información sea fácilmente disponible, comprensible y transparente para satisfacer las demandas actuales de los consumidores. Reconociendo la relevancia de progresar hacia un sistema alimentario que sea seguro, claro, equitativo, saludable y sostenible, también entendemos la necesidad de abordar las inquietudes crecientes de los consumidores que buscan información precisa y a tiempo real sobre los productos.
Entidades participantes y objetivos
Por ello, las entidades Grupo Caparrós Nature, Grupo Hispatec, Centro Tecnológico Tecnova y Parque Científico-Tecnológico de Almería, PITA, se han aliado para desarrollar el Proyecto 'eTIC4FOOD'. Este Proyecto es un Grupo Operativo Autonómico, aprobado en 2021 por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, en la Línea de Ayudas al funcionamiento de los Grupos operativos de la Asociación Europea para la Innovación (AEI) en materia de productividad y sostenibilidad agrícolas, y cofinanciado con cargo al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER).
El objetivo principal del proyecto eTIC4FOOD se ha centrado en el diseño, desarrollo y validación de una etiqueta inteligente para productos hortofrutícolas basada en las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). Así, con este proyecto se pretende mejorar la accesibilidad de la información sobre los alimentos que consumimos.
Para la consecución de dicho objetivo, el proyecto eTIC4FOOD se fragmentó en 3 etapas, una etapa inicial documental, seguida de una etapa experimental y finalmente una etapa divulgativa en la que se maximice la visibilidad del presente proyecto, y se facilite la transmisión del conocimiento generado durante su ejecución a los sectores interesado en estas nuevas tecnologías de etiquetado.
Fase documental
Durante la etapa documental se realizó una actualización del estado del arte de los hábitos de alimentación actuales del consumidor, así como las tecnologías de la Información y Comunicación disponibles para poder diseñar y desarrollar la etiqueta inteligente en diferentes productos hortofrutícolas. Así, se determinaron las necesidades de información requeridas por el consumidor a lo largo de toda la cadena de valor de los dos productos hortofrutícolas bajo estudio. También se llevó a cabo una evaluación de los requisitos que debería tener la plataforma que iba a contener la información, con el objetivo de prever las posibles alternativas y tecnologías a aplicar a la hora de desarrollar dicho sistema de información.
Finalmente, la etapa documental culminó con un estudio en el que se evaluaron las tecnologías de la información y comunicación más empleadas en el sector alimentario y que podrían ser transferidas al sector hortofrutícola, el cual se encuentra actualmente menos desarrollado en este ámbito. Además, durante esta etapa se llevó a cabo un análisis interno sobre lo que debería figurar en la etiqueta para poder cumplir los objetivos y requerimientos del proyecto, de manera que se pudiera llegar a una situación de compromiso en relación a la información que se quiera mostrar a los consumidores y al mismo tiempo que pudiera ser técnicamente viable para su implementación a gran escala.
Productos hortofrutícolas modelo para la implantación del Sistema de Etiquetado Inteligente.
Fase experimental
La fase experimental del proyecto se inició con el diseño y construcción del sistema de información, en el que Hispatec tuvo un peso muy importante en la construcción de dicha plataforma. Durante esta fase, Grupo Hispatec diseñó un proceso ETL (Extraction, Transformation and Load) que permitiese extraer el conjunto de datos de las diferentes fuentes de datos, transformarlos en un formato estándar y cargarlo en el Data Lake de la plataforma del proyecto eTIC4FOOD. Así, a través de la etiqueta inteligente se podrán mostrar todos estos datos y presentarse a los consumidores de forma rápida y fácil.
Al mismo tiempo, se dio a conocer con detalle lo que realmente necesita saber el consumidor para incentivar la compra y consumo de productos hortofrutícolas. Para ello, se realizaron encuestas, en colaboración con el resto de los miembros del consorcio, para conocer de primera mano las necesidades y opiniones de los consumidores y poder tener un feedback sobre los principales puntos clave que deben incluirse en la etiqueta inteligente.
En una primera encuesta, los consumidores habituales de frutas y hortalizas valoraron cuál es la información más importante que debería estar presente en la etiqueta inteligente del producto. En este sentido, para la mayoría de los consumidores la información relativa al valor nutricional del producto (75% consumidores), su origen (85% consumidores) y las condiciones de cultivo (65% consumidores) fueron las seleccionadas como indispensables a la hora de aparecer en la etiqueta. Además, en esta misma encuesta, los consumidores reflejaron que estarían dispuesto a pagar hasta un 10 % más por el producto si alguna de esta información apareciera en la etiqueta. Finalmente, para la mayoría de los consumidores (70%) el código QR sería la tecnología más sencilla para poder leer el contenido de la etiqueta inteligente, los cuales consideraron que con esta herramienta se conseguiría una mayor confianza y transparencia durante la comercialización de productos hortofrutícolas.
En una segunda encuesta, realizada a un mayor número de participantes, se plantearon preguntas relacionadas con los hábitos actuales de consumo de frutas y hortalizas, así como preguntas relacionadas con la información contenida en las etiquetas y tecnologías de fácil uso e interpretación. En este sentido, el 62% de los encuestados indicaron que solían consultar la información nutricional de los alimentos que consumen. Además, el 73% de las personas que participaron en el estudio reflejaron un consumo diario de frutas y verduras, frente al 9% y 18% de participantes que sólo lo hacían dos veces en semana y cuatro veces en semana, respectivamente. En esta nueva encuesta, de nuevo, para la mayoría de los participantes el origen del producto, así como el modelo de producción y la inclusión de recetas en las que esté incluido el producto adquirido fueron las informaciones que más valoraron a la hora de ser incluida dentro de la etiqueta. Además, el 74% de los consumidores habituales de frutas y hortalizas indicaron que el código QR sería la tecnología más fácil de usar a la hora de ver la información contenida en la etiqueta, frente al 14% y 7% que consideraron que las tecnologías NFC y Realidad aumentada, respectivamente, también serían tecnologías fáciles para acceder al contenido de la etiqueta inteligente. Finalmente, el 82% de los participantes consideraron que este tipo de etiqueta aportarían un valor añadido al producto.
Así, de acuerdo con estos resultados y a la actualización del estado del arte de los hábitos actuales de consumo de productos hortofrutícolas y las herramientas TIC empleadas en el etiquetado de alimentos, se decidió usar codificación QR, entre otras cosas, debido a que tras la pandemia del COVID-19 el consumidor está más familiarizado con este tipo de codificación en su día a día, además de convertirse en un nuevo estándar para los smartphones actuales, garantizándose la compatibilidad ya sea de manera nativa o con app externas que puedan vincularse a la cámara del propio dispositivo.
Una vez establecida la tecnología que se empleará para la construcción de la etiqueta inteligente, se llevó a cabo la discusión, a través de reuniones periódicas, de los principales contenidos que se deberían incluir en la etiqueta inteligente. En este sentido, se quería llegar a una situación de compromiso ya que no se debería abrumar al consumidor con datos muy técnicos. Además, la interfaz y la información alojada debería ser lo más fácil y amigable para poder abarcar todo el espectro de consumidores posibles. Así, se decidió que la información que se iba a mostrar en la etiqueta debía de ser clara y concisa, y que al mismo tiempo permitiese crear una identidad de marca para que esta etiqueta inteligente sirviera como punto de encuentro informativo no solo de los productos en los que ésta se encontrara localizada (tomate Cherry Lobello y Sandía Premium) sino que también hiciese de fuente de información o repositorio sobre la propia entidad (Caparrós Nature), ya sean mostrando actividades, newletters, sección de noticias, entre otros.
Para la mayoría de los consumidores la información relativa al valor nutricional del producto (75%), su origen (85%) y las condiciones de cultivo (65%) fueron las seleccionadas como indispensables a la hora de aparecer en la etiqueta
Contenido de la etiqueta
Finalmente, la información contenida en la etiqueta inteligente se ha dividido en 3 áreas informacionales relacionadas con la producción, distribución y la comercialización y consumo de los productos hortofrutícolas. En el caso de la producción, desde el equipo técnico de Caparrós Nature, formado por el departamento de calidad, de campo y el departamento de industrial e informática, se llevaron a cabo sucesivas reuniones en las que se definieron los principales puntos que deberían de incluirse en la etiqueta relacionados con la producción y distribución de los diferentes productos hortofrutícolas considerados en este proyecto.
Así, gracias a la etiqueta inteligente basada en codificación QR, el consumidor podrá obtener información dinámica acerca de las zonas de cultivo de los productos, además de ver fotos y vídeos de las fincas o invernaderos en los que se ha cultivado el producto. Además, en esta sección informacional el consumidor también podrá conocer el empleo de insumos durante el cultivo, que se encuentra categorizado dependiendo de la zona de origen del producto.
Por otro lado, en la sección de distribución, el consumidor podrá encontrar información estática relacionada con RSC, calidad, sellos, permisos, información corporativa, entre otras, siendo dicha información actualizable como si fuera un apéndice de la propia página web de la empresa. En cuanto a la sección de comercialización y consumo, aquí el consumidor podrá encontrar información relativa a la calidad nutricional de los productos, así como los modos de preparación tradicionales y alternativos, basándose en las sugerencias de preparación y presentación de los frutos tendencia en el mercado.
Para obtener la información nutricional de los productos, el Centro Tecnológico Tecnova se ha encargado de caracterizar la calidad físico-química, nutricional y sensorial de ambos productos tanto al inicio de la conservación como durante el periodo de vida útil, teniendo en cuenta diferentes escenarios de conservación.
La parte experimental de este proyecto ha culminado con la implantación de los contenidos informacionales seleccionados en la plataforma del proyecto eTIC4FOOD y la validación del mismo mediante su implementación en un sistema productivo real. Así, se generaron las etiquetas inteligentes para tomate Cherry Lobello y sandía Premium en las instalaciones de producción de Caparrós Nature, situadas en el Parque Científico Tecnológico de Almería (PITA).
Para ello, se propuso que la información contenida en la etiqueta inteligente de cada producto sea incorporada en la interfaz de eTIC4FOOD al mismo tiempo que es introducida en el software de almacén. De este modo, la etiqueta generada con el código QR le aparecerá en la pantalla de su equipo al responsable de etiquetado, que se encargará finalmente de adaptarla para su impresión en la etiquetadora de la línea de confección correspondiente.