La fruticultura podría complementar la agricultura intensiva en Almería
28 de septiembre de 2010
La fruticultura es una actividad rentable que complementaría a la agricultura intensiva, según se concluyó en el I Seminario Agronómico de la campaña 2010/11 de la
Fundación Cajamar. Así se inicia un año más un nuevo ciclo de los seminarios que se vienen organizando conjuntamente por la Fundación Cajamar y Coexphal. En esta ocasión el tema versaba sobre las posibilidades del sector de la fruticultura en la provincia de Almería.
El seminario titulado ‘Fruticultura Tropical y Mediterránea’ se inició con la intervención del doctor Julián Cuevas, Catedrático del Departamento de Producción Vegetal de la Universidad de Almería y estrecho colaborador del Área de Fruticultura Subtropical Mediterránea de la Estación Experimental Fundación Cajamar.
Conclusión del Seminario Agronómico de la Estación Experimental de la Fundación Cajamar.
Comenzó con un somero análisis del sector agrícola almeriense, basado casi exclusivamente en la producción hortícola intensiva y destacando la escasa importancia de la fruticultura. En el núcleo de su ponencia resaltó las posibilidades de la fruticultura como actividad económica rentable para diferentes comarcas de la provincia, complementando y contribuyendo a la diversificación del sector agrícola almeriense. Cultivos frutales tropicales y subtropicales como el mango, el aguacate, el chirimoyo, el níspero o la papaya o de clima mediterráneo como la uva de mesa, el caqui o el granado, pueden establecerse en nuestra provincia como lo hacen en otras provincias del sur y levante peninsular. Este tipo de actividad agrícola contribuye a la conservación del paisaje y del medio ambiente y puede aportar empleo y actividad para las zonas más desfavorecidas.
Tras una degustación de mango y uva de mesa sin semilla de producción propia, el seminario continuó con la intervención de Juan José Hueso, Ingeniero Agrónomo, investigador de la Estación Experimental de la Fundación Cajamar, que explicó las bondades del cultivo del níspero japonés para las zonas tempranas de nuestra provincia. El desarrollo de diferentes herramientas y estrategias como el aclareo químico, el uso de estrategias de riego deficitario o el establecimiento de plantaciones de alta densidad permiten adelantar la cosecha, mejorar la calidad de la fruta, incrementar los rendimientos y reducir los costes de producción, elevando notablemente la rentabilidad de este cultivo.
Mónica González Ingeniera Agrónoma, también investigadora de la Estación Experimental, recordó la importancia que tuvo la uva de mesa para la economía almeriense durante dos siglos y las circunstancias que contribuyeron a la casi total desaparición de este sector en la provincia, que además no ha sido sustituido por otra actividad. También explicó cómo actualmente otras regiones han cogido el testigo y son ahora los principales productores de uva de mesa, un sector muy dinámico. Se han atesorado durante mucho tiempo conocimientos sobre el parral que se pueden perder para siempre si no se han perdido ya.
Donde hubo uva puede haber nuevamente uva, ahora sin semilla. Como ejemplo se presentó la posibilidad de cultivar ‘Autumn seedless’, una variedad nieta de la uva ‘Ohanes’, en zonas frescas para el mercado de navidad, empleando una combinación de técnicas de cultivo que permiten retrasar la maduración. Los resultados de este ensayo se recogen en un documento técnico titulado ‘Uva de mesa. Técnicas para retrasar la recolección’ editado por la Fundación Cajamar que se entregó a los asistentes junto con otro documento también editado recientemente titulado ‘Fenología de la maduración del fruto en chirimoyo. Determinación de un índice de recolección’.
Tras las intervenciones se hizo una mesa redonda en la que los asistentes tuvieron la oportunidad de intervenir y enriquecer el seminario con preguntas orientadas sobre todo a las oportunidades de negocio que pueden representar estos cultivos.
Por último, se realizó una visita a las instalaciones de la Estación Experimental en la que se mostraron las parcelas uva de mesa, níspero japonés, caqui, aguacate, mango y chirimoya donde se realizan los ensayos del Área de Fruticultura.