El proyecto Diverfarming reduce un 30% el uso de fertilizantes en el cultivo del brócoli asociándolo a habas
El resultado de la asociación de cultivos ha reducido la aplicación de fertilizantes y ha mejorado la calidad del suelo en cuanto a nutrientes y materia orgánica, manteniendo la misma producción de brócoli y contando con una cosecha extra de habas.
Diverfarming busca un cambio de paradigma en la agricultura europea que, a partir de la combinación de la diversificación de cultivo y las prácticas de manejo sostenible, dará seguridad económica a la comunidad agrícola y beneficiará al medioambiente, incidiendo en la lucha contra el cambio climático. Este terreno experimental situado en Murcia y liderado por la investigadora de la Universidad Politécnica de Cartagena Virginia Sánchez Navarro se suma a los otros 25 terrenos experimentales situados en 6 países europeos en los que se ensaya la diversificación de cultivos europea.
En este campo se estudian diversificaciones de hortícolas con leguminosas con reducciones de fertilizantes. Se compara el monocultivo de la hortícola frente a la mezcla de hortícola con leguminosas o el intercalado por líneas de hortícola y leguminosa. Tanto en el ciclo de cultivos de verano como en el de invierno los resultados han sido positivos. En verano, la combinación de melón con judía de careta aumentó la producción de melón entre un 34 y un 70% con una reducción de fertilizante del 30% y un aumento de la materia orgánica y los nutrientes del suelo. Ahora, los resultados se vuelven a repetir con la producción de brócoli, que si bien se mantiene estable en comparación con la del monocultivo, se consigue reducir un 30% de fertilizantes en los cultivos asociados, además de contar con una cosecha extra de habas y mejorar la salud del suelo.
Con estos resultados, queda patente la eficacia de la asociación de hortícolas con leguminosas tanto a nivel de producción y reducción de costes como a la hora de luchar contra la degradación del suelo y cuidar de su salud.