La climatización de invernaderos en el sureste de España

Se trata de una especie de lotería en la que pocos ganan y muchos pierden. Algunos dicen que el sureste es la huerta de Europa, pero más bien nos estamos convirtiendo en el mercadillo de Europa, por mucho que nos duela. Producimos calidad y cantidad y vendemos mucho, pero solamente cuando la demanda es mayor que la oferta, es decir, cuando no les queda más remedio a los consumidores, simplemente porque no se producen hortalizas en otro lugar en invierno. Pero las cosas están cambiando con la entrada de hortalizas de países de fuera de la Unión Europea.

No debemos olvidar que la agricultura en el sureste de España se levantó a base de créditos de la banca, sin subvenciones, solamente con el esfuerzo y el dinero de los agricultores, y es por eso por lo que tenemos la certeza de que, como siempre, el agricultor español va a ser capaz de adaptarse a las nuevas tecnologías para cultivar más y con mejor calidad, y estamos seguros de que sabremos adaptarnos haciendo ‘verdaderamente’ del sureste de España el huerto de Europa.

Se empezaron a instalar las primeras instalaciones de riego por goteo. Aquellos que no se adaptaron, o simplemente desconfiaban de la eficiencia del riego por goteo, simplemente son parte de una agricultura residual, o no existen. El 99% de las explotaciones en la actualidad están dotadas cuando menos de un sistema de riego por goteo mas o menos tecnificado. Todos sabemos que siempre ha habido personas reticentes a los cambios. A pesar de las reticencias iniciales de aquellos que decían que el riego por goteo no era tan eficiente como el riego a manta, no fue fácil convencerlos de que el simple el hecho de regar con goteros era una ventaja en todos los sentidos, tanto económicos (menor consumo tanto de agua como de fertilizantes) como de manejo, puesto que proporcionó a los técnicos la posibilidad de ajustar tanto la solución nutritiva como la cantidad de agua necesaria para el adecuado desarrollo de los cultivos, traduciéndose en un incremento sustancial de la cantidad y calidad de las cosechas.

Ahora ocurre algo similar con la tecnificación de los invernaderos. Solo un dato: el noventa por ciento de las 30.000 hectáreas de la zona de poniente y el campo de Nijar no ventilan adecuadamente. E igual podríamos hablar de los invernaderos de la zona alicantina, murciana o granadina, por decirlo de una manera generalizada. Esto es tangible, pues solo hay que calcular el número de regeneraciones de aire por hora, que viene determinada por el volumen del invernadero, las características de las ventanas laterales y cenitales, la envergadura y capacidad de apertura, el espesor de la malla de las mismas, etc. al final es un cálculo matemático, y las cuentas no salen. No es necesario explicar que la mayoría de enfermedades producidas por hongos son provocadas por una mala gestión del clima del invernadero.

La cuestión es que hay de prepararse para competir con países que están emergiendo con mucha fuerza en el mercado europeo y además invirtiendo mucho en dotar a los invernaderos con los últimos avances tecnológicos (invernaderos multitúnel con simple o doble pared, antesalas, pantallas, grandes ventilaciones, sistemas de humedad, destratificadores, canales suspendidas, sustratos, recuperación y desinfección de drenajes, sistemas de fertirrigación del tipo Xilema o controladores climáticos como Climatec, que gestionan el clima del invernadero).

Y el criterio es que no existe otra manera de hacer frente a esta situación tan difícil que dar otro paso al frente y proceder a tecnificar nuestros invernaderos para hacerlos más productivos, como hizo Holanda en su momento, porque la importación de hortalizas de terceros países a Europa, tanto de todo el Arco Mediterráneo, como en especial de Turquía y Marruecos, es ya imparable. Tenemos que ser conscientes de ello y actuar de la misma manera que actuaron los Países Bajos cuando España entró a formar parte de la Comunidad Económica Europea. ¿Estaban los agricultores de Holanda preocupados por la entrada de productos españoles? Por supuesto que sí. Lo estuvimos viendo y viviendo en Holanda, y la preocupación de los productores era evidente, pero supieron resistir y sobreponerse, dando un paso adelante, definiendo su modelo de producción y poniéndolo en práctica.

La forma en que reaccionaron fue ejemplar, digna de admirar, porque supieron ver que la única forma de competir con el resto de países exportadores era la tecnología aplicada a la agricultura. Y ahí están los resultados, las explotaciones más productivas de Europa se encuentran en Holanda.

Hasta ahora hemos sido competitivos porque producimos en el sureste de la Península Ibérica, que a pesar de ser una zona semidesértica cuenta con una ventaja que muy pocos países tienen, el clima, ya que nuestros inviernos son más suaves y soleados que el resto de Europa. Con eso ha sido suficiente hasta ahora.

Pero una cosa es evidente, o nos adaptamos nosotros y nuestras infraestructuras o veremos cómo países del entorno mediterráneo toman la delantera y nos superan en todos los aspectos. Así está sucediendo en otros ejemplos muy conocidos, como por ejemplo México, que ha pasado en 20 años de tener una agricultura muy rudimentaria a tener invernaderos tecnológicos con niveles de producción muy por encima de los situados en el sureste español, y al nivel del modelo holandés. Todo ello gracias, entre otras cosas, a empresas ubicadas aquí, que han llevado sus conocimientos y tecnología de producción a diferentes puntos del mundo. Novedades Agrícolas es una de ellas, con 21 años de bagaje en México.

Seguramente tengamos la generación de ingenieros agrícolas mejor preparada de Europa, pero, salvo contadas excepciones, por desgracia no sabemos sacar provecho de su talento, pues la función de un ingeniero de campo se limita a corregir la solución nutritiva del riego y a resolver problemas de plagas y enfermedades. Esto es un desperdicio de talento y recursos, puesto que los invernaderos pueden ser hasta dos/tres veces más productivos si están bien diseñados y manejados, y de esa manera sí que podrían nuestros ingenieros hacer producciones altamente rentables para el agricultor.

Novedades Agrícolas diseña, fabrica y construye instalaciones de última generación (desde invernaderos Multitúnel a pantallas, pasando por unidades de ósmosis inversa capaces de generar cualquier tipo de caudal, unidades de desinfección del agua de riego (lámparas UV, electrolisis, ozono), calefacción, humificadores que trabajan a distintas presiones, sistemas de cooling, canales suspendidas, embalses, así como sistemas de fertirrigación y clima.

Todos estos componentes, diseñados, construidos y montados por verdaderos profesionales, son capaces de realizar el ‘proyecto completo’, sin recurrir a consorcios de empresas ni a búsqueda de terceros para realizar una obra, todo se realiza con un solo interlocutor para la realización del proyecto. Una ventaja que solo Novedades Agrícolas es capaz de dar, un servicio muy valorado y reconocido internacionalmente.