Azadiractin, materia activa pionera en bioprotección de cultivos hortícolas de Sipcam, cumple 25 años

Esta sustancia posee varios mecanismos de acción insecticida que permiten combatir a las plagas más complejas como la Tuta Absoluta o la mosca blanca.

Daniel Mulas (izq.), Product Manager de Biocontrol y Bióticos de Sipcam, y Jose Luis Martínez, Crop Manager de Cultivos Extensivos y Olivar, en una plantación de pimiento tratada con Azadiractin.

El Product Manager de Biocontrol y Bióticos de Sipcam Iberia, Daniel Mulas, tiene claro la razón de la larga y exitosa trayectoria de Azadiractin: “AZATIN fue en 1995 el primer bioinsecticida que se comenzó a comercializar en España compuesto por Azadiractin. A diferencia de otras soluciones de más fácil manejo, este producto ofrecía un menor impacto medioambiental y menos residuos en la cosecha, cualidades que permitieron a Sipcam posicionarse como empresa pionera en un mercado emergente”. AZATIN fue renombrado como ALIGN y cinco años después ya se había convertido en un producto consolidado para los agricultores más avanzados a las novedades y demandas del sector.

En la actualidad, el catálogo de bioprotectores de la compañía ha crecido con ZENITH A26 y ADINA. Sin embargo, los agricultores que han crecido con Azadiractin no dudan del gran potencial que sigue teniendo esta materia activa líder en el mercado ecológico. “No existen muchas herramientas que controlen tantas plagas como ZENITH A26. Tras 20 años utilizando esta molécula de Sipcam, uno de sus principales atractivos es la capacidad de mezclarse bien con otros productos para el control de oídio y mildiu en mis cultivos”, explica Jose Miguel Moreno Cano, agricultor de pepino holandés en ecológico en Almería.

Extraída de semillas de Azadirachta indica, un árbol cuyas propiedades insecticidas se conocen desde hace siglos en Asia, la materia Azadiractin cumple 25 años en Sipcam reforzando su eficacia con sus diversos mecanismos: interfiere en el proceso de muda de los insectos mejorando su eficacia en insectos en su estado larvario, tiene un fuerte efecto antialimentario y posee una importante reducción de la movilidad del insecto. Además, está registrada para agricultura ecológica y biodinámica, lo que permite a agricultores como José Miguel no tener ningún problema a la hora de vender su género “ya que está permitida por todas las comercializadoras de la zona”, comenta.

En 2020, Sipcam sigue apostando por la Azadiractin con el bionematicida ADINA, diseñado especialmente para el riego por goteo, que ofrece una gran flexibilidad en momentos de aplicación y condiciones. Pero sin duda, el principal valor diferencial de esta materia activa de origen natural es su actividad sistémica, la cual le permite el movimiento por la planta desde el sistema radicular (protegiendo a la planta desde la raíz hasta la superficie en todo momento).

Asimismo, no solo está limitada a la agricultura ecológica ya que, en la convencional, si el agricultor utiliza nematicidas de síntesis, puede aplicar ADINA a posteriori con las ventajas de reducir el número de residuos de fitosanitarios y el interesante efecto sobre otras plagas aéreas.