Desde la entrada de datos hasta la imposición de planchas
Flujo de trabajo, la próxima generación
Martin Spaar, Redactor Jefe de Publisher15/07/2008
15 de julio 2008
Los sistemas de flujo de trabajo tradicionales están convirtiéndose en la plataforma de integración de la impresión en red. Además, el JDF e Internet están dando un impulso a esta evolución al que ningún proveedor de servicios de impresión va a poder escapar.
PDF & JDF X1. El PDF Print Engine de Adobe, como base de las soluciones actuales de flujo de trabajo, es compatible con los estándares PDF y JDF: el documento PDF transporta el contenido de las páginas; los ficheros JDF, la información de proceso relativa al reventado, imposición, transparencias y gestión del color. (Foto de Adobe).
La posibilidad de disponer de un flujo de trabajo bien coordinado es esencial para cualquier sector de producción, incluida especialmente la industria de las artes gráficas. El proceso de trabajo en este sector, desde la entrada de datos hasta la imposición de planchas, está dominado por los sistemas de flujo de trabajo de preimpresión tradicionales. En estos momentos, en el mercado podemos encontrar diversas soluciones de flujo de trabajo basadas en PDF: entre las más utilizadas, ApogeeX de Agfa, Prinect de Heidelberg, Prinergy de Kodak, XMF de Fujifilm y Trueflow de Screen.
Movimiento impulsado por PDF Print Engine de Adobe
Los mayores cambios en este mercado los está trayendo el PDF Print Engine de Adobe que, tras su presentación en la primavera de 2006, se abre camino ahora en las soluciones de flujo de trabajo. Con este motor de búsqueda, 14 años después de la introducción del formato de datos, por fin se dispondrá de flujos de trabajo PDF nativos basados en la tecnología de Adobe. Hasta ahora, los datos en PDF se convertían a formato Postscript, y luego se interpretaban mediante RIP. El problema es que Postcript no permite trabajar con transparencias, de modo que es necesario simplificarlas previamente; es decir, las transparencias son transformadas, según su complejidad, en gráficos de mapas de bits o gráficos vectoriales, y esto puede originar problemas en el reventado o en la gestión del color. Puesto que los diseñadores utilizan mucho los efectos transparentes, ya que además las herramientas de diseño Adobe InDesign y QuarkXPress lo permiten, el paso por Postscript daba cada vez más problemas. Gracias a PDF Print Engine, ahora la gestión del color y el trapping (reventado) pueden ser administrados directamente sobre el objeto transparente, y se garantiza un correcto procesamiento por el RIP.
Además, al basarse en la misma tecnología que la herramienta del Creative Suite de Adobe, el motor PDF promete una mayor seguridad en la producción. Esto significa que Acrobat 8 Professional renderiza un PDF con el mismo motor que el RIP de salida, con lo cual se mejora la comprobación en pantalla. Con el anuncio del Print Engine, Adobe había prometido también la introducción de un motor común “Common Renderer”, una deuda que acaba de saldar ahora. La prueba blanda en Acrobat no permite tener una vista previa reticulada, de modo que, por ejemplo, el reventado no puede aplicarse realmente a escala 1:1.
La implantación del PDF Print Engine de Adobe ha planteado a los fabricantes de soluciones de flujo de trabajo, en parte, más retos. Por ejemplo, muchos habían creado soluciones de reventado que, ahora, con la funcionalidad correspondiente del motor de impresión PDF, se han quedado obsoletas. El salto más radical en este campo lo ha dado Fujifilm. La firma japonesa aprovechó la implantación del PDF Print Engine para introducir en el mercado una nueva solución de flujo de trabajo, el XMF (flujo de trabajo multimedia).
Prinect scheduler ECI RGB. Una solución de flujo de trabajo integrada actual debe incluir también un gráfico electrónico que ofrezca una visión general del estado de evolución del trabajo y, por ejemplo, que avise de los retrasos en los plazos de entrega. (Foto de Heidelberger Druckmaschinen AG).
Precursores del flujo de trabajo multimedia
La integración de PDF Print Engine en los sistemas de flujo de trabajo corrientes se verá impulsada por las nuevas normas PDF/X. De hecho, una gran parte de los sistemas de flujo de trabajo presentados en la feria Drupa 2008 serán compatibles con PDF/X-4. Además, el concepto de un flujo de trabajo multimedia, que ya permitía la norma PDF/X-3, se extenderá con los sistemas de flujo de trabajo nativos PDF. Las imágenes y gráficos en ficheros PDF en espacio de color RGB se convertirán mediante el RIP en el espacio de color CMYK. Con esto, se gana flexibilidad en cuanto al uso de distintos sustratos. Por ejemplo, un anuncio que debe aparecer en un periódico o una revista ya no tiene que prepararse por separado.
El hecho de que ahora la gran mayoría de los sistemas de flujo de trabajo tomen sus funciones principales del mismo PDF Print Engine de Adobe priva a los proveedores de estos sistemas de una buena parte de las posibilidades de diferenciación que tenían hasta el momento. De esta manera, en el futuro, esta diferenciación ya no va a estar en funciones tales como un mejor reventado en el primer plano, sino en la oferta de funciones adicionales y, sobre todo, en una mayor integración de todo el flujo de trabajo más allá de la preimpresión.
La espina dorsal de la impresión en red
En realidad, los sistemas de flujo de trabajo de preimpresión se están convirtiendo en el eje integrador de un proceso de impresión totalmente integrado. Ursula Voss-Eiden, directora de marketing de Kodak Graphic Communication Group, señala al respecto: “Una solución de flujo de trabajo futura debe ser compatible con todas las normas del sector que se necesiten para establecer un proceso totalmente automatizado, integrado y continuo, y esto significa la integración tanto con los sistemas internos como con los de los socios externos. Esta solución futura será muy compleja en el fondo, pero debe poder utilizarse con facilidad y ofrecer una gran transparencia. Al mismo tiempo, debe ser una solución modular y flexible, a la que se puedan añadir componentes adicionales, de modo que cubra distintos procesos de producción y de impresión y que se adapte a las exigencias individuales de los impresores”.
Jörg Bauer, director de Prinect de Heidelberg, aparte de preocuparse por la integración, concede una gran importancia a la transparencia de costes: “Los sistemas que podemos considerar serios se basan en la norma JDF. Los clientes quieren transparencia, no sólo una solución aislada. Estos sistemas no sólo presentan integración en cuanto a la interfaz, sino que ofrecen la posibilidad de compartir toda la información de forma bidireccional, lo cual permite, por ejemplo, hacer un análisis preliminar de costes exacto y, sobre todo, un análisis exacto de los costes reales. Los datos necesarios para realizar estos cálculos sólo deben introducirse una vez en el sistema, son gestionados en él de forma centralizada y, además, las personas autorizadas pueden recuperarlos en cualquier momento. La gestión y toda la producción se realizan en un solo sistema de flujo de trabajo. Además, estos sistemas integrarán cada vez más soluciones web-to-print, de comprobación remota y archivo”.
Kodak Insite. Mediante el navegador web, el cliente puede participar en el proceso de producción: el cliente puede revisar los pedidos, aprobar la producción o indicar cualquier cambio. (Foto de Kodak).
JDF: del oficio a la industria
Todos los proveedores y fabricantes están de acuerdo en que esta integración debería basarse en el estándar JDF, que ya casi es el lenguaje XML de la industria gráfica. En la feria Drupa de 2004, el JDF fue uno de los protagonistas principales; de hecho, muchos llaman a esta edición la “Drupa del JDF”. No obstante, el revuelo en torno a este tema se ha calmado desde entonces. El asesor suizo de preimpresión Stephan Jaeggi estaba convencido de que en la feria Drupa de 2008 el JDF se volvería a colocar en los primeros puestos del orden del día. “En la Drupa 2004, se habló mucho de las posibilidades del JDF; ahora, es el momento de que los fabricantes demuestren que han implantado el JDF en sus flujos de trabajo y que estas soluciones funcionan en la práctica”.
Según Jaeggi, las repercusiones del JDF no se han valorado en su justa medida: “Para nuestro sector, el JDF constituye la mayor revolución desde que Guttenberg introdujera los tipos móviles. Con el JDF, la impresión va a pasar definitivamente de ser un oficio a ser una industria, y eso va a tener importantes consecuencias en todas las etapas de producción y en todos los puestos de trabajo”.
Jaeggi cree que la implantación de flujos de trabajo en JDF es un tema de capital importancia. “Este gran potencial de racionalización despierta miedo e inseguridad entre los interesados. Existe el riesgo de que la introducción de proyectos JDF se tope con la oposición de las partes implicadas”. En realidad, los proyectos premiados con los galardones CIPPI, otorgados por la CIP4, demuestran que el potencial de optimización de los costes gracias al JDF es enorme. Por ejemplo, con la implantación de un flujo de trabajo continuo basado en JDF, la compañía de impresión noruega PDC Tangem ha logrado en cinco años un ROI (retorno de la inversión) superior al 1.800 por ciento; es decir, la inversión se ha amortizado en este tiempo 18 veces. Con JDF, PDC Tangem ha integrado seis prensas offset y tres plegadoras en el flujo de trabajo de impresión y en el sistema MIS; la productividad de las prensas offset ha aumentado un 25 por ciento y la de las plegadoras, un 15 por ciento.
Internet como motor de la automatización
El flujo de trabajo se ve impulsado además por Internet como plataforma de optimización del trabajo para la producción de impresos. Vistaprint, la imprenta en línea más grande del mundo, ejemplifica bien las posibilidades de una producción de impresos más industrializada. En sus centros de impresión de Canadá y Holanda se producen más de 20.000 trabajos de impresión diarios. En el centro de cálculo de Bermudas, se producen en cuestión de segundos minuciosos trabajos de impresión que, en unos minutos, pasan a las planchas multitrabajo. Así, en una plancha puede haber 142 tarjetas de visita, 52 postales o 9 hojas de tamaño carta. Desde la imposición hasta el envío y la facturación, pasando por la propia impresión, todo está altamente automatizado.
La presión sobre los precios ejercida por las imprentas en línea y sus instalaciones de impresión va a obligar a los pequeños impresores a automatizar sus flujos de trabajo. Otro de los elementos que va a ganar importancia es la inclusión del cliente en el proceso. Y en este campo, las imprentas online también son pioneras. Así, junto con la automatización de los procesos de producción, se está registrando también una “automatización” de los clientes: el cliente introduce (carga) por sí mismo el original digital reproducible en el flujo de trabajo y rellena mediante un formulario web todos los datos necesarios. Además, la tendencia imperante es incluir a los clientes en el proceso de producción mediante un navegador web. Por ejemplo, el sistema de flujo de trabajo ApogeeX de Agfa, con el software Delano, en marcha desde hace tiempo, permite que el cliente apruebe el producto antes de la impresión mediante una prueba blanda en un espacio de trabajo virtual y que introduzca las correcciones pertinentes. Además, probablemente en poco tiempo, el sistema ERP del cliente también podrá comunicarse mediante XML/JDF con el sistema de flujo de trabajo del impresor. Esto permitirá utilizar sistemas de aprovisionamiento electrónico (e-procurement), algo que ya es normal en muchos sectores.
La industrialización del sector de las artes gráficas es imparable. Los proveedores de servicios de impresión deben reorientarse y preparar sus flujos de trabajo para los retos del futuro. La implantación de un flujo de trabajo integrado en JDF no puede retrasarse, igual que la instalación de una prensa nueva o la actualización de una versión de una suite.
Martin Spaar es Redactor Jefe de la revista especializada suiza Publisher, que se edita desde 1993. Está muy comprometido con la homogeneización de los flujos de trabajo digitales en el sector de las artes gráficas y es socio directivo de PDFX-ready. Como miembro fundador de la Asociación Europea de Impresión Digital (EDP por sus siglas en inglés), apoya el intercambio de información y de ideas entre las revistas especializadas europeas.
Martin Spaar.