El desarrollo de la propiedad intelectual no está respaldado por la externalización de los procesos de diseño y fabricación
3 de septiembre de 2007
“La mayor parte de los fabricantes encuestados esperan incrementar el uso del outsourcing para el diseño y la producción de sus productos”, dice Rob Mitchell, editor del informe, “pero mientras esta aproximación ahorre dinero e incremente la flexibilidad, es improbable que tenga un impacto positivo en la creación de nuevo conocimiento y propiedad intelectual. La identificación y transferencia del conocimiento –tanto a nivel interno como en las fronteras de la compañía- sigue siendo un reto significativo para el sector”.
- La mayor parte de las compañías no conoce la extensión de su propiedad intelectual: aproximadamente la mitad de los encuestados afirma no conocer la extensión real de la propiedad intelectual en su empresa, lo que sugiere que cada vez existe una mayor necesidad de darse cuenta del valor total de este activo vital.
- Los encuestados esperan un incremento de la propiedad intelectual procedente de fuentes externas a su empresa: los socios externos todavía no se han convertido en fuentes importantes de propiedad intelectual para muchas organizaciones, a pesar de que el 67 por ciento de los encuestados espera que la proporción de propiedad intelectual derivada de fuentes externas se incremente en los años venideros.
- Se percibe que los principales beneficios derivados de la mejora del flujo del conocimiento a través de la organización son: compartir las mejores prácticas adquiridas en los procesos de negocio y el incremento de la capacidad de responder más efectivamente a las demandas del consumidor.
- Las empresas deben diseñar cuidadosamente los canales de comunicación que sirvan a sus objetivos con más eficacia: una aplastante mayoría de los encuestados (91 por ciento) afirma que los contactos cara a cara son un canal efectivo para la comunicación y transmisión del conocimiento y la información. Se percibe que otros canales son considerablemente menos efectivos, a pesar de que todavía el 58 por ciento cree que las intranets cumplen con esta función, mientras que un 52 por ciento se decanta por el e-mail y un 49 por ciento por las teleconferencias. En la actualidad, con la mayor parte de la compañía colaborando y trabajando con múltiples equipos y zonas horarias, este descubrimiento sugiere que las mejores maneras de compartir información y conocimiento deben ser consideradas cuidadosamente, sobre todo cuando las reuniones cara a cara no son posibles.