PU248 - Plásticos Universales
33 también ha presentado la Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, la nueva Estrategia Industrial, el Plan de Acción de la Economía Circular, la Estrategia 'de la granja a la mesa' de alimentación sostenible y las propuestas para una Europa sin contaminación. Comienzan de inmediato los trabajos para endurecer los objetivos de emisiones de Europa para 2030 y se fija una senda realista hacia el objetivo de 2050. La consecución de los objetivos del Pacto Verde Europeo exigirá una inversión significativa. Se calcula que cumplir los objetivos actuales en materia de clima y energía para 2030 requerirá 260.000 millones de euros de inversión anual adicional, lo que representa aproximadamente el 1,5% del PIB de 2018. Para ello habrá que movilizar a los sectores público y privado. ESPAÑA Y LA ECONOMÍA CIRCULAR La Estrategia Española de Economía Circular (EEEC) establece unas orientaciones estratégicas y se marca una serie de objetivos cuantitativos a alcanzar para el año 2030: reducir en un 30% el consumo nacional de materiales en relación con el PIB, tomando como año de referencia el 2010; reducir la generación de residuos un 15% respecto de lo generado en 2010; reducir la generación de residuos de alimentos en toda la cadena alimentaria (50%de reducción per cápita a nivel del hogar y consumo minorista y un 20% en las cadenas de pro- ducción y suministro a partir del año 2020); incrementar la reutilización y preparación para la reutilización hasta llegar al 10% de los residuos municipales generados; mejorar un 10% la eficiencia en el uso del agua, y reducir la emisión de gases de efecto invernadero por debajo de los 10 millones de toneladas de CO2-equivalente. La EEEC identifica como sectores prioritarios de acti- vidad en los que incorporar este reto para una España circular el sector de la construcción, el agroalimentario, el pesquero y forestal, el industrial, el de bienes de consumo, el de turismo y el textil y confección. Además, se menciona como políticas clave para avanzar en economía circular las políticas económicas, de fisca- lidad, empleo, I+D+i, de consumo, la política industrial, del agua, agraria y de desarrollo de áreas rurales. Por otro lado, las líneas principales de actuación sobre los que se focalizarán las políticas e instrumentos de la Estrategia de Economía circular y sus correspondientes planes de actuación son ocho. Cinco de ellas relacio- nadas con el cierre del círculo: producción, consumo, gestión de residuos, materias primas secundarias, y reutilización del agua, y las tres restantes, con carácter transversal: sensibilización y participación, investigación, innovación y competitividad, y empleo y formación.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx