como vector clave para la descarbonización de la industria y la movilidad, así como instrumento para el almacenamiento energético. “El reconocimiento otorgado y la ambición mostrada permite consolidar la apuesta para que España se convierta en una potencia productora de hidrógeno renovable en Europa, a través del desarrollo de una industria nacional que abarque toda la cadena de valor”, señala Joan Batalla, presidente de la Asociación Española del Gas (Sedigas). No obstante, la meta fijada para el biogás (20 TWh/a, equivalente mínimo a unos 6,5 TWh/a de biometano) no ha cambiado respecto del borrador y la consideran "limitada y poco ambiciosa". Además, denuncian, "no está alineada con el potencial de producción identificado, ni con el apetito inversor existente". Según la evaluación realizada por el sector gasista, existe un potencial técnico de producción de hasta 163 TWh, "volumen suficiente para descarbonizar el 50% de la demanda nacional de gas natural". En este momento, el sector estima ya un número de 685 instalaciones y una producción asociada de aproximadamente 29 TWh/a – sobre la base de expresión de interés para su conexión a las infraestructuras de transporte y distribución. Tampoco cumplen sus expectativas sobre el biometano, "este documento no refleja la oportunidad que representa para el país en términos de mejora de nuestra autonomía energética, reducción de emisiones y de nuevas oportunidades de empleo y desarrollo industrial. El biometano es una tecnología madura, probada y segura que nos ofrece una solución para la problemática de la gestión de los residuos y además puede integrarse de manera directa y eficiente en las infraestructuras de transporte y distribución de gas existentes”, comenta Joan Batalla. Finalmente, aunque el PNIEC refleja el papel crucial que jugarán los ciclos combinados en el sistema eléctrico español, desde Sedigas consideran urgente implementar un mercado de capacidad que garantice su viabilidad económica, asegurando su operación para apoyar la integración masiva de energías renovables, que son intermitentes y no gestionables. Greenpeace: “El PNIEC se queda muy lejos de la velocidad necesaria y de lo indicado por la ciencia”. La asociación ecologista Greenpeace también ha publicado sus valoraciones respecto al PNIEC, al que le acusan de no incluir medidas adicionales para acelerar el abandono del uso de gas, carbón y petróleo. Aún reconociendo que el nuevo Plan Integrado de Energía y Clima (PNIEC) supone una mejora respecto al plan anterior, Greenpeace considera que “se queda muy lejos de la velocidad necesaria y de lo indicado por la ciencia”. Y echan en falta medidas para “mejorar los objetivos de reducir emisiones, la vida de la ciudadanía y la economía de las familias”. n 17 LEGISLACIÓN
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