FO112 - FuturEnviro

En la actualidad, el destino más común para las baterías de ion litio (LIBs) —empleadas tanto en aparatos electrónicos, como móviles y ordenadores, y en la movilidad eléctrica (patinetes, bicicletas, motos y vehículos)— es su almacenamiento en vertederos, lo que conlleva un enorme riesgo de seguridad y para el medio ambiente. Debido a su composición, las baterías descartadas pueden incendiarse o explotar, lo que supone un riesgo evidente tanto para las plantas de tratamiento de residuos como durante su transporte. En cuanto a su impacto medioambiental, las baterías tienen componentes químicos que se pueden liberar al medio a medida que estas se degradan, explican en una nota de prensa fuentes del Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas). Aimplas coordina un proyecto para reutilizar y reciclar baterías de ion litio y recuperar los metales valiosos que contienen Además, el litio es una de las materias primas consideradas críticas por la Unión Europea por su importancia estratégica y económica y con riesgo de una demanda elevada, ya que se considera fundamental en la movilidad eléctrica y para la transición hacia una economía baja en carbono. Esta situación es abordada por Aimplas mediante el proyecto Metallon, en el que participan el Grupo de Investigación en Ingeniería Ambiental (GI2AM) de la Universitat de València, la empresa del sector de la movilidad de vehículos eléctricos, GDV Mobility y la empresa gestora de residuos informáticos y tecnológicos Recuintec. 56 ECONOMÍA CIRCULAR/INVESTIGACIÓN

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